Miguel Sánchez
En la política argentina casi todo parece estar marcado por Perón. La opinión que viertas sobre él te posiciona dentro de los esquemas ideológicos del país. Aún a día hoy. Y es que el personaje tiene multitud de lecturas. Asociado con potentes sindicatos, fue el azote de la oligarquía rentista bonaerense. Sin embargo, es conocida su simpatía hacia los nazis escondidos en Sudamérica. Su enfrentamiento con el sector más conservador de la Iglesia le hizo adoptar postulados muy avanzados. ¡Hasta el punto de que fue excomulgado! Aunque al tiempo… el autoritarismo de sus gobiernos está lleno de sombras y prácticas represivas.
La esquizofrenia ideológica creada por Perón llegó a su paroxismo el 20 de junio de 1973. Tras casi 18 años de exilio en el Madrid de Franco, Perón regresaba a una Argentina convulsa. A fin lograr su bendición, en el aeropuerto de Ezeiza se daban cita sus seguidores. Seguidores que iban desde los Montoneros -de izquierda revolucionaria- hasta los sindicalistas de la CGT -representativos de la derecha nacionalista-. Una amalgama antinatura que acabó con 13 muertos y 365 heridos. Aún a día de hoy, el Peronismo sigue siendo todo un quebradero de cabeza para politólogos e historiadores. Sin embargo, una cosa está clara: para los coches Perón tenía un gusto exquisito. Y si no, échale un ojo a este precioso Ferrari 212 Inter.
EL PRIMER FERRARI EN SERIE
Más allá de que fuera uno de los coches de tan inclasificable personaje, lo cierto es que este Ferrari 212 Inter brilla con luz propia. Para muchos es el primer modelo fabricado ‘en serie’ por Ferrari, con unas 73 u 82 unidades según la fuente consultada. Aparecido en 1950, estuvo en producción hasta el 52. Y en parte nos recuerda al Pegaso Z102, porque han sido muchos los que lo han carrozado. Aún perteneciendo al mismo modelo, hay unidades muy diferentes entre sí. Unas están vestidas por Touring, otras por Vignale, algunas por Pininfarina… ésta la firma la turinesa Ghia.
De todos modos, aunque lo que más nos llama la atención de este modelo es su particular combinación de colores… lo realmente interesante está en el interior. Bajó el capó se esconde un 12 cilindros “Colombo”, el motor más mítico de Ferrari. Ya lo hemos dicho en otras ocasiones: aquel que, a través de multitud de evoluciones, fue el corazón de decenas de cavallinos desde 1947 hasta 1988. En este caso es un 2’6 litros enlazado a una caja de cambios manual de 5 velocidades.
0191 EL. UN CHASIS CON HISTORIA
Esta unidad está marcada con el código 0191 EL. Y desde luego… tiene historia. Presentada en el Salón del Automóvil de París en 1952, Perón quedó prendado de ella. Tanto que inmediatamente la adquirió, viajando hasta la Quinta de Olivos: la vivienda de los jefes de estado argentinos. Sólo permaneció en sus manos durante 3 años ya que, en 1955, después del repentino derrocamiento y exilio de Perón, este Ferrari quedó en manos del estado.
Tras casi 20 años resguardado en un garaje, es vendido en 1973 a un coleccionista nacional. Éste lo atesora durante 14 años, tras los cuales lo vende a un concesionario europeo para experimentar allí una restauración que lo devuelve al estado original de 1952, siendo vendido a un nuevo dueño en 1999.
Gracias a su originalidad y elegancia, esta unidad se ha paseado por concursos como el de Peeble Beach o el Cavallino Classic. Y además… acaba de ser subastada por RM Sotheby’s, alcanzando… Bueno, ya sabéis como van estas cosas. Una de esas cifras que, aunque siempre espectaculares, son un poco una pena.
