La Escudería
La XXIII edición de la Concentración Nacional del Club SEAT 1500 se celebró en las Rías Altas de Galicia. Comenzó en una bella mañana, con nubes de bruma flotando sobre la ría de Cedeira (La Coruña), en la que los participantes que no habían pernoctado y disfrutado de la cena con vistas al mar de la víspera, fueron acudiendo al Hotel Herbeira.
El aparcamiento pronto acogió un total de 22 unidades del SEAT 1500 en el año de su aniversario. Había hasta diez “monofaros”, incluido uno familiar; siete “bifaros”, incluido uno fúnebre, y cinco SEAT 1500 “maleta cuadrada”, incluido uno alargado. Las provincias de procedencia fueron, como siempre, muy dispares. Había participantes de La Coruña, Soria, Jaén, Asturias, Navarra, Segovia, Madrid, País Vasco, Cantabria, Ciudad Real, León y Málaga.
LA RUTA DE LA CONCENTRACIÓN NACIONAL
La comitiva se puso en marcha por las tranquilas y serpenteantes carreteras rodeadas de verdor hacia el mirador de Chao do Monte, donde se paró unos minutos para disfrutar de las espectaculares vistas. A continuación, se dirigió hacia San Andrés de Teixido para visitar el santuario del siglo XVIII, donde varios socios recibieron la especial bendición de su capellán. Existente desde el siglo XII, el coqueto pueblecito y la fuente de los deseos, invita a acatar lo recogido en el dicho popular gallego de peregrinar al santo lugar, porque allí vai de morto quen non foi de vivo (“va de muerto quien no fue de vivo”).
A continuación, la marcha prosiguió hasta el mirador de Herbeira, que, con sus 630 metros es el acantilado más alto de Europa. Está coronado por una garita de vigilancia que ha desafiado los elementos desde el año 1805. Posteriormente, la ruta continuó hasta el impresionante Cabo Ortegal y su faro, donde se une el Océano Atlántico con el Mar Cantábrico. Finalmente, prosiguieron hasta el famoso banco, el más bonito del mundo por sus vistas, en los increíbles acantilados de Loiba.
Desde allí a Viveiro y, tras cruzar el airoso puente de la Misericordia iniciado en el siglo XV y realizar una intricada ascensión, comida en la Parrillada San Roque. Un lugar de buen yantar, inmejorable pulpo y espectaculares vistas sobre Viveiro y su ría. Al término de la larga sobremesa se dirigieron al Hotel Boa Vista de Viveiro.
ENTREGA DE PREMIOS
Tras la cena de especialidades gallegas, con abundancia de pescado y mariscos, llegó la preceptiva entrega de trofeos. Resultó galardonado Emilio Vara Sánchez con el premio al coche más lejano, pues había venido desde Málaga con su “monofaro”. El trofeo al mejor estreno fue para Justo García Díez, que llegó desde Tera (Soria) con otro “monofaro”. También se reconoció la impecable labor de Modesto Vázquez Sánchez como organizador.
El domingo arrancó con un breve paseo desde el Hotel Boa Vista hasta el puerto de Viveiro. Allí quedaron estacionados los vehículos mientras los participantes realizaban una agradable travesía en barco hasta el Fuciño do porco (Hocico de cerdo), curiosísima formación geológica también conocida como Punta Socastro.
Al término de la singladura, se dispuso de tiempo libre para disfrutar de un paseo por el centro histórico de Viveiro, con sus iglesias medievales, su animada plaza Mayor y su monumental puerta de Carlos V. Para clausurar la XXIII Concentración Nacional del Club SEAT 1500 se celebró una comida en el Hotel Boa Vista. A su término, los participantes iniciaron los largos viajes de retorno a sus lugares de origen.
Texto y fotos Javier Martínez Romera.
