Alfa Romeo 85 Quadrifoglio, el fabuloso “Deltona” del biscione que nunca fue

Vayamos a los inicios de la década de los 90 y hagamos un ejercicio de imaginación. Se acaba de presentar el nuevo Alfa Romeo 85, un compacto que la marca sitúa entre el 33 y el 75 que toma la base del Lancia Delta. Sin duda, es una forma de aprovechar que la marca del biscione ha sido adquirida por el Grupo Fiat pocos años antes. Además, no es la primera vez que se hace, pues ahí tenemos el ejemplo del Saab 600.

Por supuesto, el Alfa 85 es perfectamente reconocible como un modelo de la marca, con su clásica parrilla, unos faros rectangulares más perfilados y las llantas típicas de la marca. Para los más fanáticos, es posible que no fuera suficiente, pero a buen seguro que se planteó un interior diferente. Quien se subiera al coche, se encontraría en territorio Alfa Romeo, no hay duda.

En el momento de su lanzamiento, ya se ha decido que tendrá una versión prestacional que sirva para prestigiar toda la gama. No servirá para homologar ninguna variante de competición, puesto que en rallies está Lancia y aún no se ha decidido si se dará el salto al Mundial de Coches de Sport con el Alfa SE048SP. Lo que es seguro es que habrá un 85 que luzca la insignia del Quadrifoglio.

NACE EL ALFA ROMEO 85 QUADRIFOGLIO

Por razones prácticas, el 85 mantuvo los motores de origen Lancia, aunque con culatas con su nombre. Así que, para la versión más deportiva se tiró por la calle de en medio y se optó por usar como base el salvaje Lancia Delta HF Integrale Evolution I. Eso suponía emplear el motor de 4 cilindros en línea de 1.995 cm³ y 210 CV a 5.750 vueltas, aunque en con la potencia rebajada a 205 CV.

El futuro Alfa Romeo 85 Quadrifoglio tendría por lo tanto tracción total, lo que terminaba de completar un cóctel explosivo. Exteriormente, la inspiración en el “Deltona” era más que evidente, pues conservaba los paragolpes e incluso su característico alerón trasero. No obstante, la parrilla en rojo y las llantas tomadas directamente del SZ le conferían un aspecto netamente Alfa. Además, contaba con dos salidas de escape dobles.

En la zaga, la inscripción 2.0 y Quadrifoglio no dejaban duda de que estabas ante un modelo especial. También lucía el anagrama “iniezione turbo” tanto en el portón trasero como en las taloneras. El cóctel se remataba con el sofisticado color rojo Italia para la carrocería que bañaba incluso a los retrovisores en esta versión. El interior no sólo era deportivo, también era lujoso e incluía elementos como elevalunas delanteros, techo solar y cierre centralizado.

CANCELADO

Todo estaba dispuesto para que el nuevo Alfa Romeo 85 Quadrifoglio se convirtiera en la referencia del sector, pues dinámicamente fue puesto a punto por los técnicos del biscione. Se buscaba darle un punto de deportividad extra respecto al HF Integrale para justificar la diferencia de precio, pues contaría un 15 % más que aquel.

Incluso se preparó toda una campaña de lanzamiento con anuncios con eslóganes como “Ten una aventura con un italiano”, “Bajo el capó: Cuore sportivo”, “La trasera no deja dudas” o “Belleza, potencia y lujo”. Finalmente, todo quedó en nada por la crisis económica de aquellos primeros 90, que desaconsejó que Alfa distrajera recursos de su otro lanzamiento, el 155. El 85 Quadrifoglio jamás llegó al mercado.

En realidad, el modelo surge de la imaginación del diseñador independiente Andrej Troha, quien soñó hace un tiempo con cómo sería un Alfa 85 basado en el Delta. Su trabajo nos ha servido para fantasear sobre un coche combinaba lo mejor de dos marcas históricas en un tiempo que ya no volverá.

Imágenes de Andrej Troya vía Car Expert.