Javi Martín
Los entusiastas del mundo del motor, a veces, somos un poco especiales. Por ejemplo, puedes encontrar el aficionado a las carreras, que no tiene ni la más remota idea de coches de producción, al tiempo que puedes encontrar el caso contrario, el aficionado a los coches que no sabe nada sobre competición. Está el aficionado adicto a los datos, el amante de la mecánica y el virtuoso del volante. ¿Y qué decir de los amantes de los clásicos? Aquí tenemos una variedad igual de heterogénea, a la que debemos añadir aquellos que son fanáticos de los clásicos y que no entienden -ni quieren entender- nada de vehículos modernos.
Obviamente, es un simple ejemplo de lo pintoresco que resulta el mundo del motor. Personalmente, soy de los que no tienen ni idea de carreras (aunque fui seguidor acérrimo de la Fórmula 1 durante mucho tiempo, al igual que de rallies). Pero sin embargo me gustan los coches modernos, me gustan los clásicos, me gustan los vehículos de competición, me gusta la Historia… de hecho me gustan hasta las motos (tengo formación básica en mecánica de motocicletas). No sabría en qué grupo meterme, ciertamente.
No obstante, nos hemos dejado un grupo que también tiene sus “pequeñas variantes”: los coleccionistas de automobilia. ¿Quién no tiene revistas en casa? ¿y libros? Hay aficionados que coleccionan piezas de coches, los hay que coleccionan cosas relacionadas con los coches, hay quien tiene cuadros, quien colecciona fotos y, por supuesto, está el coleccionista de maquetas y/o miniaturas ¿Quién no tiene alguna maqueta en casa?
Artesanía española
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Lo que no había visto nunca es que alguien se fabricará sus propias maquetas partiendo de cero, hasta que un día encontré en Instagram una cuenta llamada AMF Modelscars, dedicada como bien indica el nombre, a los coches a escala. El caso es que en su descripción específica «Hand crafted Modelcars and Kits”, “Maquetas y Kits hechos a manos”
Eché un ojo a las fotos en varias ocasiones, busqué en internet maquetas a ver si había alguna similar a los mostrados en el perfil y finalmente, por curiosidad, contacté con el perfil para seguir indagando. Así es como conocí a Antonio Martínez – Fresneda (de ahí viene, como cabe esperar, AMF), un ingeniero mecánico español especializado en automoción y afincado en Alemania que se mostró, en todo momento, encantado de responder mis preguntas y de contarme su historia. Una historia que comenzó antes incluso de comenzar a caminar…
Como las mejores historias, todo empieza en la niñez
El propio Antonio nos cuenta su historia: «Todo esto de mi interés por los coches a escala tiene tiempo. Al cumplir 1 año una tía abuela mía me regalo un coche de 1/18. Burago, que era lo único que había por aquel entonces, y desde ese momento me regaló uno en cada cumpleaños y navidad para que fuera teniendo una colección, y siempre inculcando que eso no eran juguetes, que eran artículos de colección. Esto fue levantando mi interés por los clásicos y coches en general, hasta tal punto que estudié ingeniería mecánica y me especialice en Automoción. Incluso me mudé a Alemania para trabajar en la industria del automóvil, hace ya mas de 10 años.
Volviendo a los coches a escala, hace unos 18 o 20 años ya tenía una colección bastante importante de 1/18 y 1/12, y decidí empezar a modificar modelos para hacer versiones de Le Mans, DTM, Daytona…. En esa época sobre todo modificaba coches de los 80 y 90 y seguía coleccionando clásicos de todas las épocas. Entonces había varios proveedores que vendían trans-kits y kits en resina para hacer estas conversiones. Una cosa llevó a la otra y aprendí a hacer mis propios moldes para poder copiar y hacer yo mismo las piezas o carrocerías que necesitaba para los modelos que quería hacer.
Después de mudarme a Alemania y llevar un par de años desarrollando componentes en la industria del automóvil, empezaron las primeras impresoras 3D. Entre la experiencia que ya tenia diseñando en 3D y la posibilidad de imprimir en 3D prácticamente cualquier cosa, decidí hacer el 3D de varios coches de 1900 a 1930 que siempre quise tener en escala.
Con las características de esas primeras impresoras 3D no se podía conseguir una gran resolución ni detalles muy precisos, pero fue un comienzo. Y precisamente esos primeros modelos, impresos en máquinas de filamento y suavizados con masilla, pintados con latas de Tamiya, sin aerógrafo, llamaron la atención en Instagram de algún coleccionista. Esto dio pie a las primeras ventas de esos primeros modelos que había modelado (Fiat S76 «Beast of Turin», Talbot lago T26c y Bentley 4,5Lr Birkin Blower fueron los primeros).
Poco después las impresoras 3D de Resina entraron en juego, y eso permitió detalles inimaginables: Más precisión que con moldes de silicona, y con la flexibilidad de poder modificar cada carrocería o cada pieza e imprimirlo sin necesidad de hacer un molde. En paralelo fui mejorando mis técnicas y equipo para poder conseguir el mejor acabado posible. Empecé a hacer mas modelos para mi colección privada y a aceptar pedidos, aunque no era mi principal motivación por aquel entonces. Hasta que llego un punto en el que di con el dueño de un coche que yo quería hacer. Contacte con él para pedirle información, pero le pareció tan buena la idea que me pidió varias unidades de su coche, y conocidos suyos me pidieron después sus coches.
A partir de ese momento fui conociendo a mas y mas gente del sector, sobre todo dueños y talleres de restauración de «Prewar cars» y por suerte cada vez hay mas pedidos de personas que quiere tener o bien su coche/coches a escala o un determinado coche/modelo en particular.
Actualmente sigo en Alemania, pero ya esta programada la vuelta a España para montar el nuevo taller en el área de Madrid.
Actualmente aceptamos pedidos por email ([email protected]) o por Instagram (@amfmodelcars). La página web se lanzará una vez estemos establecidos en el nuevo taller que os contaba».
– ¿De dónde sale esta idea de crear maquetas personalizadas?
Bueno, en principio hacia los modelos que yo consideraba interesantes o que me gustaran, y a raíz de eso, me fueron pidiendo que hiciera determinados modelos bajo pedido o versiones de los que ya había hecho.
– ¿Hay mucha gente interesada en estos trabajos? Imagino que no serán precisamente baratos
Sí hay gente, sobre todo propietarios de clásicos que quieren tener su propio coche a escala.
Si los comparamos con los modelos que se venden en producción masiva no son baratos no, pero teniendo en cuenta la cantidad de horas que implica hacer un nuevo modelo no diría que son caros. Por supuesto dependiendo del modelo, de la escala y de si se quiere con o sin motor, varia el precio mucho.
– ¿Qué es lo más difícil de crear estas maquetas?
Sin duda modelar el 3D, de muchos coches no hay mucha información o planos disponibles; muchos coches son únicos y hay que basarse en fotos y dimensiones básicas. En la mayoría de los casos los propietarios son los clientes y pueden facilitar esta información.
– ¿Qué criterios sigues para escoger uno u otro modelo?
Si me piden que haga un modelo, mientras sea clásico, en general no digo que no. Si es decisión mía hacer un modelo, normalmente tiendo a hacer coches de entre 1900 y 1960. Me gustan mucho los coches con motores de aviación de la I Guerra Mundial, pero se venden menos que otros coches mas populares como Austin 7, Avions Voisin, Amilcar… Estos últimos son bastante populares en Europa, y hay muchos propietarios que quieren tener su coche en escala, mientras que los «Aero» tipo el Napier Railton son coches únicos, y solo gente que lo ha visto y se encapricha con un modelo lo pide.
– Si yo quisiera hacerte un encargo, ¿Qué necesitaría?
En principio Fotos y medidas del exterior e interior, cuantas más mejor. Y si hay disponibles planos del coche, facilita mucho el trabajo. Si se quiere en escala grande, tipo 1/12 o 1/8 con motor, también muchas fotos del motor, chasis y demás detalles. Si es un coche de principios del siglo XX seria bueno tener fotos del coche por debajo para poder ver el chasis. Aunque no se disponga de fotos y medidas, estoy en contacto con expertos, propietarios, museos y talleres de restauración que podrían conseguir información de casi cualquier coche.
– ¿Cuál es el encargo más complicado que te han hecho? ¿Y el más raro?
Aunque parezca mentira el mas complicado ha sido el Alfa Disco Volante coupé. Fue un pedido de un cliente habitual, y conseguir modelarlo en 3D fue un infierno.
En cuanto a rareza, nada muy descabellado. Me han pedido un poco de todo, coches únicos, piezas para dioramas, trofeos para poner junto a los coches de escala. Me han mandado la pintura original de coches para que la use en las maquetas. Me han pedido ornamentos y placas de carroceros como Figoni&Falaschi para usarlas en coches que están restaurando. Un buen amigo mío que trabaja en un taller de restauración en Bélgica está haciendo una maqueta en 1/43 de la famosa curva del circuito de Brooklands, simulando la foto en blanco y negro, incluyendo los barcos, la gente, los coches….
– Siendo un trabajo puramente artesanal, ¿cuánto puedes llegar a tardar en fabricar una maqueta?
Pues depende mucho del coche, escala y sobre todo si el coche ya lo tengo modelado. Los coches que están modelados y solo tengo que pintar y montar, solo lleva una semana, de la cual la mayor parte del tiempo está secándose entre capa y capa de pintura. Cuando es un coche nuevo, puede llevar en torno a un mes solo en el modelado 3D; si es en escala 1/12 o 1/8 con motor, puede llevar incluso mas tiempo.
Actualmente mi lista de espera es de en torno a medio año.
– ¿Qué materiales empleas? ¿Podría pedirte una de madera, por ejemplo?
El principal es resina, pero uso otros muchos materiales para detalles (madera para interiores, latón para detalles, cuero, cables, hilos, tornillos…)
Hacer un coche entero de madera me llevaría demasiado tiempo y no estoy seguro del acabado.
– Los aficionados a los coches somos muy, por así decirlo, «especiales», ¿Te has encontrado con alguno más «especial» de la cuenta?
Me he encontrado con algún cliente extremadamente pendiente de los detalles del coche, hasta el punto de decirme el numero total de remaches de cada panel. Teniendo en cuenta que el coche tiene miles… pero lo veo como algo positivo a la hora de mejorar.
– ¿Tienes alguna anécdota curiosa que nos puedas contar?
Lo más curioso es quizá los clientes. Un cliente me pidió un Delahaye 135CS en 1/12, sin darme fotos ni detalles, le enseñe fotos del coche en el que me iba a basar y le pareció bien. Me pidió que se lo llevara a Bélgica en mano. Cuando llegue me abrió el garaje y resulta que ahí tenía un 135CS original…
Otro cliente me pidió un coche del que solo había en Google una foto en blanco y negro borrosa de la única carrera en la que participo en los años 30. Le dije que me seria casi imposible hacer un modelo solo con esa foto y con la poca o nula información que había del coche en cuestión. Me mando una carpeta con decenas de fotos y detalles y me dijo no te preocupes, lo tengo yo en mi granero restaurado.
– ¿Has rechazado alguna vez algún encargo?
Si, pero solo rechazo coches modernos.
