Aparta las dichosas manos de mi clásico
in

Aparta las dichosas manos de mi coche clásico, por favor

En cualquier concentración, feria o salón celebrado en suelo patrio hay algo que nunca falta, los maleducados que no se resisten a tocar los vehículos expuestos, por no hablar de los que directamente se suben en ellos.

Hay costumbres que se mantienen arraigadas en un país hasta el punto de que parece imposible que cambien. En el caso de España, hay algunas como la siesta que se ha hecho famosa en el mundo entero, pero también hay otras de las que tenemos que sentirnos menos orgullosos. Me refiero a la dichosa manía de tocar los coches expuestos en cualquier muestra o concentración. Sucede una y otra vez a lo largo y ancho del país.

Prueben ustedes a hacer la prueba en la próxima concentración o salón al que acudan. Simplemente quédense observando a los visitantes mientras estos disfrutan de los coches y motos clásicos expuestos. No tardaran en ver a alguien tocando un auto. Algunos lo harán casi furtivamente, casi de manera imperceptible, otros irán más allá, apoyarán sus manos, tocarán la carrocería e incluso recorrerán con los dedos mientras pasan a su lado. Lo peor es que no es cosa de edad, pues uno podría pensar en que los jóvenes son más despreocupados, todos lo hemos sido. No, muchos adultos tienen la misma actitud.

Hombre apoyado en un coche clásico
Imagen de Cord Allman en Pixabay

Los hay más osados, por supuesto, pues hay “aficionados” que incluso se apoyan en los capós para sacarse fotos o se suben en las estriberas de los preguerra para tomarse una instantánea. Diré más, existe un perfil que incluso prueba a intentar abrir los coches, quiero pensar que por mera curiosidad, aunque uno nunca sabe ante dichas actitudes. ¿Exagero? Déjeme que les cuente una anécdota vivida en primera persona.

“BÁJENSE DEL COCHE, POR FAVOR”

Corría el año 2009 y en el IFEMA se celebraba la que finalmente sería la última edición de Retromóvil Madrid bajo la organización original. Allí estaba quien esto escribe como miembro de la redacción de la revista Coches Clásicos con el correspondiente estand. Habíamos llevado para decorar nuestro espacio el Packard 526 Sedán de Jaime Queralt-Lortzing y SEAT 850 Sport de Pablo Gimeno, modelos que rápidamente despertaron gran interés entre el público del salón.

Evidentemente, nos pasamos la mitad de la feria pidiendo a los visitantes y curiosos que no tocaran el Packard y que, por supuesto, no se subieran a la estribera para sacarse fotos. Hubo quien se subió e incluso vio el coche por dentro, pero siempre pidiendo permiso a Jaime o a quien estuviese en el estand en ese momento. Y es que, por supuesto que los clásicos se pueden tocar, pero siempre pidiendo permiso previo. Se llama educación, algo que algunos parecen desconocer y, lo que es peor, les da completamente igual.

Aunque el verdadero desmadre se vivió con el 850 Spider hasta el punto de que, hubo un momento en el que, mientras varios de nosotros chalábamos animadamente, no nos percatamos de que un matrimonio se había subido alegremente al coche a sacarse fotos. Habían abierto las puertas y se había instalado cómodamente en el interior, con un par. Nuestra reacción fue inmediata, conminándoles a bajarse del 850 de inmediato, ante lo que la pareja se sintió ofendidísima. ¡Ellos! “Es el coche que estaba abierto”, nos espetaron como justificación, casi como acusándonos a nosotros. Al final iba a resultar que su falta de educación era culpa nuestra, vivir para ver.

El matrimonio se marchó enfadadísimo dejándonos a todos desconcertados con su actitud. Con lo fácil que hubiese sido reconocer su error y pedir perdón, maneras ante las que es posible que incluso les hubiésemos ayudado a sacarse más fotos con el ocho y medio. Pero no, lo de sostenella y no enmendalla también es deporte nacional.

LA VIDA SIGUE IGUAL

Uno podría pensar que las cosas han cambiado mucho en los últimos 15 años, pero algunas de las fotos que ilustran este artículo son de 2024, así que, como ves, querido lector, no hemos evolucionado lo más mínimo. De hecho, en el evento Boadilla Cars by MQC, en el que LA ESCUDERÍA ayudó a conformar la exposición de clásicos, sucedió lo mismo. La organización se vio obligada a poner cintas rodeando los coches y carteles de “No tocar” al poco de abrirse las puertas.

Sucede en todos los sitios, pensaréis, pero no, uno sale a la Rétromobile de París o a cualquier evento fue y prima la educación. Y no quiero decir que no haya quien toque los clásicos, que hay maleducados en cualquier lugar, pero ni de lejos el fenómeno es tan frecuente y esta tan extendido como aquí. ¿Y qué podemos hacer para cambiar estas actitudes? Pues primero de todo, empezar por uno mismo, pues seguro que en ocasiones todos hemos tocado algún clásico que no era nuestro. Además, no estaría de más, animar a nuestros conocidos mantenerse a distancia prudencial.

Car Garage ClassicMadrid
Una rara imagen en un salón en la que nadie está tocando ningún clásico. Así debería ser siempre.

Lo que no recomendaría es llamar la atención a nadie salvo que se trate de nuestro propio coche, pues uno no sabe con que clase de energúmeno puede dar. Simplemente se trata de ser un poco más educados, lo que redundará en beneficio de todos, puesto que, si alguien ve esas actitudes, finalmente decidirá no sacar su clásicos a ningún salón o concentración. En definitiva, se trata de que nadie tenga que decirnos “Aparta las dichosas manos de mi coche clásico, por favor”.

Imágenes cortesía de Isidro Iglesias. Imagen de portada de Pexels en Pixabay.

Foto del avatar

Escrito por Iván Vicario Martín

Tengo la suerte de haber convertido mi pasión en mi forma de ganarme la vida. Desde que salí de la Facultad de Ciencias de la Información en 2004 me dedico profesionalmente al periodismo del motor. Arranqué en la revista Coches Clásicos en sus inicios, pasando a dirigirla en 2012, año en el que también me puse al frente de Clásicos Populares. A lo largo de estas casi dos décadas de carrera profesional he trabajado en todo tipo de medios, incluyendo revistas, radio, web y televisión, siempre en formatos y programas relacionados con el motor. Me vuelven loco los clásicos, la Fórmula 1 y las 24 Horas de Le Mans.

Suscríbete a la Newsletter

Una vez al mes en tu correo.

Muchas gracias! No olvides confirmar tu suscripción mediante el email que acabamos de enviarte.

Algo ha salido mal. Por favor, vuelve a intentarlo.

60.4kFans
2.1kFollowers
3.4kFollowers
3.9kFollowers