Resulta muy complicado encuadrar en una categoría concreta al protagonista de este artículo, el Renault 5 Durisotti. Y es que, el carrocero francés imaginó y construyó una interpretación del R5 con la parte trasera de la carrocería elevada que nos recuerda sin duda al Matra Rancho. Al contrario que éste, no parece preparado para desenvolverse fuera del asfalto y quizá por allí llegó su fracaso.
Durisotti es un carrocero francés con sede en Sallaumines, al norte de Francia, cerca de la frontera con Bélgica. Arrancó su actividad en 1956, dedicándose inicialmente al mantenimiento de autobuses. En 1968, la empresa decidió dedicarse a hacer transformaciones tomando como bases coches pequeños, principalmente Peugeot y Renault.
En su momento, fue uno de los pioneros en la fabricación de furgonetas con techos elevados de poliéster. Por lo tanto, podemos deducir que, cuando se lanzó a desarrollar el peculiar R5 que os mostramos, sabía muy bien lo que hacía. Lamentablemente, esta idea no tuvo más recorrido, como veremos a continuación.
EL RENAULT 5 DURISOTTI
El prototipo se construyó en el año 1981 tomando como base un Renault 5 TS, es decir, con el motor de 1.289 cm3 y 64 CV. En su momento, era una de las versiones más interesantes del modelo. No hay duda de que se buscaba realizar un vehículo polivalente, que aumentara la capacidad de carga del R5, ya fuera para ejercer de furgoneta o como coche recreacional.
No hay apenas información sobre el modelo, pero es evidente que, para hacerlo viable económicamente hablando, se transformaron el menor número de elementos posible. De esta forma, se conservó toda la parte delantera del coche e incluso se mantuvo la batalla inalterada. Sobre el techo delantero, se colocó una baca y la parte posterior está sobreelevada y cuenta con una enorme superficie acristalada.
Dispone de un generoso portón posterior vertical para mejorar el acceso a la parte trasera. Los pilotos y la ventana trasera originales se han mantenido, adaptándose de forma sobresaliente al nuevo diseño. Por lo demás, no cambian ni las llantas ni el tamaño de las ruedas. Durisotti firmó su trabajo en la parte superior del lateral del techo.
EJEMPLAR ÚNICO
Aunque el resultado era ciertamente atractivo y el coche estaba bien resuelto, en Renault consideraron que no tenía cabida en su gama. No necesitaban una furgoneta, pues ya tenían la R4, y como vehículo recreacional, tampoco aportaba grandes novedades frente a la competencia, léase el Matra Rancho. Ni siquiera contaba con el aspecto campero de aquel.
Por lo tanto, el Renault 5 Durisotti quedó en ejemplar único y posiblemente acabó siendo destruido. Solamente existe la foto del coche que os mostramos, que fue publicada en la web de Le Club Air-5. Curiosamente, el carrocero francés sí consiguió convencer a Peugeot de hacer el 205 Multi, que fabricó en colaboración con Gruau.