Ya son casi siete años escribiendo en La Escudería; un tiempo en el que hemos analizado el mercado de clásicos, investigado rarezas e intentado comprender no pocos aspectos técnicos. Seguiré a este lado del teclado si usted permanece atento al otro lado de la pantalla.
Aunque Ettore Bugatti era reacio al uso del compresor volumétrico frente al puro carácter atmosférico, en 1926 estrenó una versión sobrealimentada de su exitoso Type 35 capaz de escalar en su potencia hasta los 140 CV.
Dotado con un grado de equipamiento realmente asombroso, el Corrado se alza hoy en día como la alternativa más interesante si se está pensando en adquirir un Golf GTI Mk2.
A pesar de sus líneas claramente influidas por el estilo de Virgil Exner, el Ferrari 410 Superamerica carrozado por Ghia es un «cavallino» inserto en los tiempos previos a la relación de exclusividad dada entre Pininfarina y Ferrari.
Aunque Porsche está mucho más asociada al Mundial de Marcas, lo cierto es que no sólo ha tenido un papel destacado en la F1 como proveedora de motores sino que incluso llegó a tener escuadra propia durante dos temporadas.
Si se encuentra buscando un clásico sin complicaciones y personalidad el Honda CR-X Del Sol puede ser su respuesta.
El lanzamiento del Golf GTI en 1976 marcó el inicio para todo un nicho de mercado basado en la deportividad en formato compacto; sin embargo podemos encontrar antecedentes del mismo tan interesantes como el 128 Rally o el Escort Mexico.
Presentado en 1926, el Miller 91 no sólo equipó un motor con sobrealimentación sino también la posibilidad de tener tracción delantera.
Más allá del Land Rover de 1949, tan sólo dos años más tarde coincidieron en su aparición tres modelos responsables de replicar el diseño del Willys MB para los ejércitos británico e italiano.