Iván Vicario Martín
El coche nació en 2019 de la colaboración de Bugatti y de The Little Car Company. Su nombre es Bugatti Baby II porque el Baby original lo construyó el mismísimo Ettore para su hijo Roland. Contaba con motor eléctrico de 12 voltios, caja de cambios de cuatro velocidades y discos de tambor. Es decir, era totalmente funcional. De aquel primer cochecito sólo se fabricaron 500 unidades que hoy en día se cotizan por encima de los 25.000 euros.
El Bugatti Baby II emplea tecnología de vanguardia, pero respetando siempre la esencia de la marca. Además, también se fabricarán únicamente 500 coches. Está construido a una escala del 75%, basado en el escaneado en 3D del Tipo 35 del Gran Premio de Francia de 1924. Cuenta con su propia gama de tres modelos diferentes: el Base, el Vitesse y el Pur Sang y es funcional tanto para niños como para adultos.
Como buen producto oficial Bugatti, se ofrece con materiales y componentes de primerísima calidad. Además, cada una de las 500 unidades del Bugatti Baby II se ensamblan a mano y cuentan con una placa con su propio número de chasis.
CONFIGURADOR Y PRECIOS DESBOCADOS
En Bugatti han cuidado todos los detalles y ofrecen su propio configurador para el Baby II. En él tendremos que escoger, primeramente, entre las tres versiones. El modelo Base se ofrece con las baterías de 1,4 kWh y el motor de 4 kW, que permite correr entre 20 km/h en el modo novato y 45 km/h en adulto. La carrocería es de composite.
El Vitesse llega con baterías de 2,8 kWh y una mejora en el motor, que alcanza los 10 kW con el Speed Key. Las velocidades máximas se mantienen inalteradas. Eso sí, la carrocería pasa a ser de fibra de carbono. Para coronar la gama, encontramos el Pur Sang, con similares características técnicas que el Vitesse, pero con una exclusiva carrocería de aluminio hecha a mano que imita las originales del Tipo 35.
En el configurador, podremos elegir entre tres tipos de carrocería: la Normal, la Fender (con guardabarros) y la Touring, que incluye además espejos retrovisores e intermitentes. El modelo base sólo puede elegirse en azul con interior en negro, mientras que el Vitesse y el Pur Sang ofrecen numerosos colores para el exterior y el habitáculo. Además, disponemos de vista 360º para ver el aspecto de nuestra selección.
Lamentablemente, el precio de nuestro pequeño Bugatti está en consonancia con su exclusividad. Para comprar el modelo más económico, tendremos que desembolsar 36.000 euros. Si lo que queremos es un Vitesse, la factura se eleva hasta los 47.500 euros, mientras que el modelo tope de gama se va hasta los 62.500 euros. Es decir, cualquiera de ellos cuesta lo mismo que un coche moderno.
NO SE VAYAN TODAVÍA, AÚN HAY MÁS
Bugatti ha ido todavía más lejos, creando una versión del Baby II aún más exclusiva, inalcanzable para la mayoría del mundo. Se trata del Carbon Edition, un homenaje al exclusivo Bugatti W16 Mistral, el último en montar el motor W16 que ha propulsado a los coches de la marca desde el Veyron. Sólo se fabricarán 99 unidades a razón de 5 millones de euros cada una.
Quienes desembolsen dicha cantidad, tendrán además la posibilidad de encargar el Baby II Carbon Edition customizado con las mismas características de su W16. Incluye numerosos elementos de fibra de carbono, volante de madera o la bandera de Francia entre un sinfín de detalles característicos.
Aquí os dejamos la dirección del configurador del Bugatti Baby II para que al menos disfrutéis creando uno a vuestro gusto. Pero cuidado, que es adictivo.
