No podemos negar que la crisis generada por la incontrolable expansión del virus SARS-CoV2, nos pilló a todos desprevenidos. Y eso que ya se venía diciendo desde China. El caso es que llevamos dos años arrastrando toda clase de restricciones para intentar controlar y erradicar esta pandemia, los cuales, han ido generando toda clase de miedos y condicionando la vida de todo el mundo. Desde cierre de negocios hasta la cancelación o no realización de los diferentes eventos que se han llevado a cabo durante muchísimo tiempo.
El problema, básicamente, ha sido la concentración de gente y el miedo al contagio. Sin embargo, gracias al paso del tiempo y a que las restricciones, nos gusten o no, han ido teniendo buenos resultados, hoy podemos empezar a disfrutar de nuestra vida como lo hacíamos antes. Vacuna mediante, estamos viendo cómo poco a poco, se recupera la actividad normal; se llenas las tiendas, los bares vuelven a estar repletos de gente y por suerte para los aficionados a los clásicos, vuelven las concentraciones.
Las concentraciones de vehículos clásicos, esas que tanto juego dan para muchas personas y tanto nos gustan a los fanáticos de los coches, vuelven a cubrir la geografía nacional permitiendo disfrutar tanto a quienes no tienen clásico en casa, como aquellos que sí lo tienen y aprovechan para salir a pasear.
Así ocurrió hace unos días en Los Yébenes, en Toledo, donde se llevó a cabo una concentración de vehículos clásicos, pero que tenía un buen motivo para realizarse: era una concentración en beneficio de ADEMTO, la Asociación De Esclerosis Múltiple de Toledo. Además, junto a los coches allí expuestos y los puestos con diferentes ofertas, también había un motivo más para acudir: el sorteo de un Renault 4.
Toda la concentración fue organizada por el señor Manuel Valiente, nada menos que el propietario del espectacular Dodge Dart GT alargado que os mostramos hace unos días. Manuel logró reunir un buen plantel de modelos, con una gran presencia de clásicos populares, tan queridos en España. Desde coches poco vistos en concentraciones como un Talbot Horizon y un Talbot Solara, pasando por un buen número de Citroën 2CV, SEAT 600 y modelos no tan “viejos” como una unidad de la primera generación del Porsche Boxster, la primera entrega del Renault Clio Sport 172 CV y un Audi Coupé.
Había más ejemplares dignos de contemplar, como un par de espectaculares SEAT 1400 o un enorme Cadillac Deville de la década de los 70. Coches para todos los gustos, que por desgracia, hubo que ojear casi a la carrera porque la lluvia hizo acto de presencia. No fue mucho, pero la intensidad fue in crescendo y durante un rato todos tuvimos que resguárdanos.