Entrar y salir de un coche es una acción tan común y frecuente que en muchas ocasiones se puede ignorar que estos elementos pueden esconder un plus de creatividad. Desde alas de gaviota a la apertura suicida ha habido ideas de lo más sorprendentes a lo largo de los años.
Algunas marcas han conseguido hacer de sus puertas una seña de identidad en algunos de sus modelos como muchos Lamborghini con sus puertas de tijera o las ya mencionadas alas de gaviota en varios coches deportivos de Mercedes.
Así pues, y obviando las puertas de apertura convencional, o como en alguna vez son llamados coches cristianos, porque abren como Dios manda, estos son algunos de los tipos de puerta más peculiares.
APERTURA SUICIDA
Estas puertas de apertura hacia atrás fueron muy frecuentes en los coches de preguerra, ganando su apodo por su peligrosidad si éstas se abrían en marcha. Llegaron a ser un signo de prestigio que marcas como Rolls-Royce o Lincoln han mantenido en alguno de sus modelos más recientes.
Pero estuvieron presentes en vehículos más populares como el Citroën 2CV, Fiat 500, o el SEAT 600, cambiando por unas puertas convencionales cuando fueron actualizados con los años. Cabe mencionar que en el caso del Seílla la picaresca española hizo que se ganase el mote de “mirabragas” por razones obvias.
ALAS DE GAVIOTA
Nacidas de la mano de Mercedes-Benz con sus majestuosos 300 SL, este elemento que sigue sorprendiendo en la actualidad se hizo como una solución para alojar la estructura del coche y no como un alarde de diseño. La marca ha continuado ofreciéndolas en algunos deportivos, e igual de icónicas fueron en los Delorean en los años ochenta.
APERTURA FRONTAL
Con el fin de crear un microcoche económico para motorizar Europa tras la II Guerra Mundial, la marca Iso lanzó el Isetta, que tenía como característica una puerta frontal por la que se accedía al coche y que desplazaba también la columna de dirección. Recientemente el Microlino, que hace un claro guiñó al automóvil de los 50, también las ha implementado.
PUERTAS DE CORREDERA
Especialmente frecuentes entre vehículos industriales y furgonetas como las Chrysler Voyager y Renault Estafette, las puertas correderas también lograron colarse en algún automóvil como el curioso Peugeot 1007, y en los años 50 el Kaiser Darrin implementó un sistema por el que éstas se deslizaban hacia adelante.
PUERTAS DE TIJERA
Creadas por Marcello Gandini en los años setenta para el legendario Lamborghini Countach, estas puertas que se abren hacia arriba han logrado convertirse en una seña de identidad de la marca del toro y en otros deportivos. También tuvieron una importante presencia en la escena del tuning de los noventa, incorporadas en coches de todo tipo de manera no oficial.
PUERTAS BAJADAS
El BMW Z1 introdujo a finales de los ochenta un biplaza descapotable que contaba con unas puertas de lo más inusuales, ya que estás se bajaban, permitiendo al conductor circular sin puertas, dando un aspecto muy particular a este coche.
PUERTAS DE MARIPOSA
Muy similares a las ya mencionadas puertas de tijera, este diseño incluye una rotación extra que las termina separando más de la carrocería del coche. Están presentes en varios modelos de McLaren.
TIPO CÚPULA
Similares al acceso de los cazas, esta entrada no puede llamarse puerta como tal. Separan una parte de la carrocería del coche para permitir pasar al habitáculo y suele estar presente en prototipos como los Firebird de General Motors de los años 50 o el pequeño Bond Bug inglés de los 70.
DOOR AND GATE
Reservado principalmente para los modelos familiares del mercado americano, esta ingeniosa puerta trasera podía abrirse de dos maneras, hacia abajo, o hacia el lateral dependiendo de la maneta que se use. Eso sí, para hacerla funcionar como una puerta de embarque había que bajar primero el cristal.
CLAMSHELL DOORS
Siguiendo con las rancheras estadounidenses, General Motors ideó para la década de los setenta una puerta trasera que lograba esconderse por completo y a la cual llamaron “puerta de ostra”. Aunque la idea era muy buena y llamativa estuvo presente en sus coches durante muy poco tiempo.
PUERTAS QUE DESAPARECEN
Presentes en un único prototipo de Lincoln Mark VIII que fue desarrollado por una empresa ajena a Ford, las puertas de este automóvil lograban desaparecer por completo. Mejor que explicar su funcionamiento es preferible ver un vídeo hipnótico en las que se muestran en acción.