Pocos momentos son más recordados en la historia ya no tan reciente de Estados Unidos como el pleito contra O.J Simpson y toda la parafernalia que rodeó al polémico litigio que fue bautizado por la prensa como “el juicio del siglo”. Por familiarizar a los lectores que no hayan oído hablar del tema, O.J Simpson fue una superestrella de la NFL, que supo reinventarse tras su carrera como atleta con papeles en el cine y siendo la imagen de grandes marcas.
Pero todo eso cambió en 1994, cuando apareció el cuerpo sin vida de su mujer junto al de su amante en la casa en la que ambos habían quedado. Desde un primer momento todos los dedos señalaban al exmarido de Nicole Brown, pues se encontraron varias pruebas incriminatorias hacia O.J.
El 17 de junio de 1994 O.J recibió los cargos de asesinato por parte del Departamento de Policía de Los Ángeles, pero en lugar de entregarse decidió que lo más sensato para un personaje tan mediático como él era darse a la fuga. Con Al Cowlings, su mánager, al volante del Ford Bronco blanco de 1993 y con O.J escondido en el coche mientras amenazaba con un arma con quitarse la vida.
La persecución duró casi dos horas y 90 kilómetros es recordada por la baja velocidad el vehículo protagonista. El evento lo siguieron casi 100 millones de espectadores en directo, e hizo que algunas estaciones dividiesen la pantalla para dar un mayor protagonismo a la noticia que a la final de la NBA que tuvo lugar el mismo día.
1,5 MILLONES PARA EL BRONCO
Tras la polémica absolución de O.J Simpson el infame Ford Bronco blanco fue a parar a las manos de quien lo condujo aquella tarde, pues Al Cowlings lo compró por 75.000 dólares poco tiempo después, y lo estuvo custodiando a buen recaudo sabiendo la inversión que tenía entre manos. Sabiendo de antemano el morboso interés que producen estos objetos en Estados Unidos, el exmánager ofreció el todoterreno al programa “La Casa de Empeños” por un millón de dólares, pero no hubo trato.
El coche ha estado cedido desde entonces en el Museo Alcatraz East sobre el crimen de Tennesse, y ha sido durante años una de las piezas estrella. Cowlings tenía planes para vender el coche en 2024, coincidiendo con el treinta aniversario de la persecución, pero la muerte de O.J Simpson en abril de este año ha vuelto a despertar el interés por el coche, y aunque asegura haber recibido una oferta de 750.000 dólares, espera sacar al menos millón y medio por este curioso vehículo de colección.
Imagen: Alcatraz East Crime Museum