Ayer mismo conocíamos la noticia de la muerte del diseñador italiano Bruno Sacco a la edad de noventa años, después de que la familia emitiese un comunicado anunciando que falleció el pasado 19 de septiembre. Con una vocación desde muy joven por el mundo del diseño de los automóviles, entró a trabajar para Mercedes-Benz en 1958 en lo que parecía ser un empleo temporal y terminó siendo la empresa en la que Sacco se jubiló en 1999 como consagrado jefe de estilismo.
A modo de homenaje al italiano desde LA ESCUDERÍA hemos recopilado todos los automóviles que Bruno Sacco diseñó para la marca germana, ya que también creó autobuses y camiones. Fueron casi treinta años en los que estuvo involucrado en el diseño de algunos de los modelos más recordados de Mercedes-Benz, dotándolos de ese aspecto tan característico como reconocible y dejando una frase para la historia: “Un Mercedes-Benz siempre tiene que parecer un Mercedes-Benz«.
MERCEDES-BENZ C-111
Aunque Bruno Sacco llevaba trabajando en Mercedes-Benz como estilista desde finales de los años cincuenta su primera obra reconocida para esta firma fueron los revolucionarios prototipos del Mercedes C-111, una saga de bancos de pruebas rodantes y que tuvieron un desarrollo de una década, entre 1969 y 1979.
Estos coches sirvieron para probar tecnologías tales como los motores rotativos, o batir el récord de velocidad en un automóvil con motor diésel. Este radical vehículo con carrocería de fibra de vidrio, así como las versiones que se crearon después, le valieron a Bruno Sacco para escalar posiciones dentro del equipo de diseño de Mercedes-Benz, convirtiéndose en jefe de dicho departamento en 1975.
MERCEDES-BENZ W123
El siguiente gran proyecto en el que estuvo involucrado Bruno Sacco fue el diseño de la carrocería W123 de Mercedes-Benz, modelo cuyo debut comercial tuvo lugar en 1976, viniendo a sustituir a los que hasta entonces habían sido los coches más populares en ventas de la marca, los W114/115.
Los W123 con su moderno pero tradicional diseño lograron mantenerse en el mercado hasta 1985, logrando vender más de 2,7 millones de unidades en el proceso, un récord que ningún otro turismo de Mercedes-Benz ha logrado superar, y un automóvil que es recordado por su robusta construcción y fiabilidad mecánica.
MERCEDES-BENZ W126
Uno de los grandes hitos de Bruno Sacco como diseñador fue crear su propia versión del emblemático y prestigioso Clase S de Mercedes-Benz. Este proyecto comenzó en 1971, poco tiempo antes del lanzamiento del Clase S de los años setenta, el Mercedes W116.
Su sucesor estaría listo en 1979, y recibió la nomenclatura de W126, manteniendo muchos de los rasgos característicos del modelo anterior, pero modernizándolo con elementos como los paragolpes de plástico. Con este modelo se volvería a ofrecer una variante cupé del Clase S a partir de 1981, los SEC, coche que Bruno Sacco condujo hasta el final de su vida.
MERCEDES-BENZ W201
Toca hablar ahora de uno de los grandes desafíos para Mercedes-Benz y la obra favorita del propio Bruno Sacco; los Mercedes W201, una serie de automóviles tan revolucionaria que recibía esta nueva nomenclatura que comenzaba por el número dos. El italiano pasó entonces de diseñar el buque insignia de Mercedes-Benz a la primera berlina compacta de la marca.
Los Mercedes 190 salieron al mercado en 1982, y fueron apodados como “Baby Benz” por sus reducidas dimensiones en comparación con los otros turismos de la compañía. Pese a su pequeño tamaño los W201 no renunciaban a los rasgos característicos propios de un gran Mercedes-Benz, y se vendieron 1,8 millones de unidades hasta 1993.
MERCEDES-BENZ W124
Tras el apabullante éxito del Mercedes W123 había que buscar un digno sucesor a esta popular serie, y a este siguiente Clase E presentado en 1984 se le asignó el nombre de W124. Estéticamente era muy similar al W201, aunque de un tamaño mayor, y fácilmente identificables por su maletero con forma de V.
Esta serie de Mercedes ofrecía al igual que con los W123 las carrocerías sedán, coupé y ranchera, aunque en esta ocasión se incorporaba también a la gama un descapotable. El coche se estuvo fabricando hasta 1997, y en total se vendieron más de 2,5 millones de unidades.
MERCEDES-BENZ R129
Hasta entonces Bruno Sacco había demostrado que su diseño funcional se podía aplicar a berlinas de lujo con gran maestría, pero hasta 1989 no se había enfrentado a la tarea de crear un descapotable. Este proyecto comenzó en 1981, y para mediados de la década ya estaba decidido cual iba a ser la apariencia de este coche.
El nuevo Mercedes SL, conocido como el R129, se presentó en el Salón del Automóvil de Ginebra de 1989. Este coche, que se fabricó hasta 2001, fue recordado por sus medidas de seguridad como la jaula antivuelco que se desplegaba automáticamente en caso de dar la vuelta, y trajo por primera vez los motores V12 a la familia de los SL.
MERCEDES-BENZ W140
Para 1991 era hora de renovar el prestigioso Clase S, y así nació la serie W140 de Mercedes-Benz, que se fabricó hasta 1999. Este coche adoptaba algunos de los rasgos estéticos de los W201 y W124, tomando también un perfil bastante afilado, pero con unas formas más redondeadas que vaticinaban cómo serían los diseños en los años noventa.
Pese al impresionante aspecto de este modelo Bruno Sacco no quedó completamente satisfecho con el resultado final del coche, alegando que el Mercedes W140 era diez centímetros más alto de lo que le hubiera gustado. Junto al W140 nació también en 1992 la Clase CL de Mercedes de grandes cupés de lujo.
MERCEDES-BENZ W210
En 1995 Mercedes-Benz presentaba un nuevo Clase E, el W210, que adoptaba muchos de los rasgos, como los faros dobles y redondos, presentados por primera vez en un prototipo de 1993 llamado Coupe Concept, y que terminaría materializándose con pocos cambios con respecto al modelo final en forma del Mercedes CLK.
A diferencia de las dos generaciones anteriores del Mercedes-Benz Clase E el W210 no se fabricó en ninguna carrocería de dos puertas, ofreciéndose solo como sedán de cuatro puertas y familiar de cinco puertas. El W210 se vendió hasta 2003, y sirvió para definir el estilo de los coches de la marca en el cambio de milenio.
MERCEDES-BENZ R170
En 1995 Mercedes-Benz pretende entrar de lleno en un nuevo segmento del mercado, algo que ya habían hecho con los 190 en 1982, y esta vez era el turno de un modelo descapotable compacto al que le asignaron el nombre de R170, aunque es más conocido como Clase SLK.
El coche había sido diseñado por Bruno Sacco a finales de 1991, y para 1993 el diseño final ya era definitivo y los ejecutivos decidieron dar luz verde a su fabricación en serie. Este coche servía como un sucesor espiritual a los Mercedes 190 SL de los años cincuenta, y estuvo en producción hasta 2004.
MERCEDES-BENZ W208
Si bien los Mercedes Clase E de los años noventa no contaban con una variante cupé, esto sería porque en 1997 salieron al mercado los Mercedes W208, conocidos por crear la Clase CLK dentro de la marca, que se ofrecerían como gran turismo de dos puertas disponibles como cupé y descapotable. El coche se basaba en el prototipo de 1993 del Mercedes Coupe Concept y estuvo en producción hasta 2003.
MERCEDES-BENZ W220
En 1998 se lanza al mercado el Mercedes W220, el tercer y último Clase S diseñado por Bruno Sacco. Este coche supuso un cambio radical con respecto a las dos generaciones anteriores del modelo, ya que abandonaba las formas angulosas vistas previamente en favor de un diseño mucho más moderno y redondeado. Esta generación se vendió hasta 2006 y también estuvo disponible como cupé en la Clase CL bajo la carrocería W215.
MERCEDES-BENZ W230
El último coche diseñado por Bruno Sacco fue el Mercedes-Benz R230, en lo que sería el primer SL de la marca en el nuevo milenio. Aunque este coche se lanzó en mercado en 2001, dos años después de la jubilación de Sacco, su desarrollo comenzó a mediados de la década de los noventa, suponiendo este coche el último trabajo del diseñador italiano.