A comienzos de los 80, Enzo Ferrari sentía cercano el aliento de la muerte. Consciente de su fin, no quería irse sin antes dar un último puñetazo en la mesa. Una reivindicación de su historia capaz de poner patas arriba el mundo de los superdeportivos. El producto de aquello fue el Ferrari F40. Uno de los mayores mitos del automovilismo deportivo, tan espartano y radical que Diego Maradona rechazó el que le regaló el Napolés tras percibir que venía sin equipo de sonido.
Unos diez años más tarde, y con el Commendatore ya fallecido, Ferrari necesitaba revivir el mito de cara a los 50 años de la marca. La respuesta fue el F50. Considerado un F1 apto para la calle, englobaba el motor en un monocasco autoportante realizado en aluminio y fibra de carbono. Los aires noventeros se dejaron sentir en el sinuoso diseño de Pininfarina, criticado por muchos aun a pesar de seguir la máxima de ‘la forma sigue a la función’ lejos ya de los ángulos marcados de su predecesor.
Rápidamente todos los medios del motor se hicieron eco del último gran modelo salido de Maranello, que no era ni el más potente ni el más rápido, pero si posiblemente el más puro. Y lo hicieron justo con esta unidad. Porque lo que estás viendo es el Ferrari F50 Berlinetta prototipo de 1995. Uno de los que se utilizaron para desarrollar el modelo, publicitarlo y para hacer las escasísimas pruebas para los medios.
FERRARI F50 BERLINETTA PROTOTIPO. UNA MULA EN FIORANO
Huelga decir que a los Ferrari se les dedica el brioso apelativo de “cavallinos”. Sin embargo, los vehículos de prueba en cualquier marca suelen recibir el más seco nombre de “mula”. Justo lo que fue nuestro protagonista durante varias semanas en la pista de Fiorano: la “mula” de pruebas del F50. Sin embargo, esto le concedió dos importantes honores. El primero es tener la cualidad de ser el primer Ferrari F50 jamás construido. Todo un fetiche para los amantes de las genealogías y los números de chasis.
Y el segundo es haber sido llevado por los pilotos que trabajaron en poner a punto la salida al mercado del F50. Para que te hagas una idea, en su asiento han plantado las posaderas pilotos como Dario Benuzzi -mítico jefe de probadores en Ferrari-, Jean Alesi, Gerhard Berger y… Niki Lauda. Alguien muy apropiado para hablar de posaderas, ya que lo sensible de su trasero está detrás de la gran capacidad del austriaco a la hora de saber interpretar las reacciones de los chasis.
Probado en las pistas de Ferrari hasta la saciedad, este F50 prototipo guió la forma en la que se deberían afinar las 348 unidades siguientes. Y es que tras un meticuloso estudio de mercado, la casa de Maranello decidió construir 350 Ferrari F50. Rebajados a 349 para cumplir con la máxima del fundador: “el número ideal de coches a construir es justo uno menos del que el mercado puede absorber”. Y encima te hacían pasar todo un examen…
DE F50 PROTOTIPO A F50 EN VENTA
Tras el intenso trabajo de desarrollo, esta unidad del F50 prototipo sirvió para la presentación del modelo en diversos salones. ¡Incluso se rumorea que de este F50 prototipo se sacaron las medidas para las primeras miniaturas lanzadas por Maisto y Bburago! Así que imagina, seguramente tengas algo directamente sacado de este coche rondando por tu casa.
Tras todo el trabajo de lanzamiento, esta unidad F50 prototipo fue devuelta a Maranello, donde recibió una profunda reconstrucción y puesta a punto antes de ser vendida a Jacques Swaters, antiguo piloto de carreras y amigo personal de Enzo Ferrari. Hasta el 2007 permaneció en su colección, año en que partió rumbo a su nuevo garaje en California. Desde entonces ha pasado por varias manos, las cuales lo han llevado a ser subastado el pasado 15 de enero por Gooding and Company durante la Arizona Auction Week 2020.
Allí, el F50 prototipo alcanzó la cifra más alta del evento, pasando de manos por 3.222.500 dólares. Una cifra seguida no muy de lejos por los tres millones de dólares de un nuevo Chevrolet Stringray 2020 o los 2’4 de de un Hispano-Suiza J12 de 1932. Por cierto, si te parece algo polémico que el primer F50 de la historia ande por ahí rondando y no en un museo… Tranquilo, precisamente el último en salir de la cadena de montaje es el que está en el Museo Ferrari.
Fotos Ferrari F50 Prototipo: Gooding & Company.