Cuando Ford lanzó el Fiesta en 1976 crearon una pequeña revolución, ya que el fabricante americano asentado desde principios de siglo en el mercado europeo lanzó un modelo muy competitivo en el lucrativo segmento de los superminis nacido a principios de los años setenta.
En 1983 aparece la segunda generación del modelo, manteniendo casi la misma carrocería, pero haciendo grandes cambios estéticos. El siguiente paso en la evolución de muchos superminis a lo largo de la década de los ochenta fue el de convertirse en pequeñas furgonetas, ideales para el transporte en núcleos urbanos, como fue el caso de la Citroën C15, basada en el Visa, o la SEAT Trans, que tomaba al Panda como base.
GRUAU, UN NEGOCIO CREANDO FURGONETAS A PARTIR DE TURISMOS
Aunque algunos fabricantes europeos se sumaron a esta moda de convertir sus modelos compactos en furgonetas con una gran popularidad, lo cierto es que una gran mayoría de marcas optaron por no adentrarse en este segmento, o al menos no lo harían directamente, pues una solución más económica era recurrir a empresas carroceras para el desarrollo de versiones comerciales.
Gruau era una compañía francesa que contaba con bastante experiencia y reputación en el sector, ofreciendo preparaciones de policía de furgonetas y conversiones a minibus. Fueron la elección de Peugeot a la hora de desarrollar una furgoneta sobre la base del 205, creando así el Multi, versión fabricada entre 1986 y 1990, a lo que se sumó el Volkswagen Polo Transfer poco tiempo después.
Este negocio dedicado a las carrocerías ya había trabajado con Ford en el pasado, desarrollando autobuses sobre bastidores de la marca antes de la II Guerra Mundial. Con el fin de ampliar la oferta de pequeñas furgonetas deciden crear una versión de carga del Fiesta MK2 que incluía una caja fabricada en fibra, dotando de mucho más espacio que la versión comercial de ventanillas paneladas que ofrecía la marca y se llamaba Fiesta Van.
El modelo resultante fue bautizado como Ford Fiesta Cube, un nombre muy apropiado dada la forma cuadrada de su caja, y es que adaptar este compacto como furgoneta fue todo un desafío dando un vehículo visualmente menos atractivo que otros productos de Gruau.
FORD RESPONDE Y EL FIESTA CUBE DESAPARECE
Aunque ya la producción del Peugeot 205 Multi fue muy limitada y casi anecdótica se sabe que el Fiesta Cube fue todavía más escaso. Muestra de ello es que apenas se conocen detalles de su fabricación, aparte de que se vendió hasta la llegada del Fiesta de tercera generación.
El Ford Fiesta MK3 llegó al mercado en 1989, pero en 1991 la marca presenta la Ford Courier, una pequeña furgoneta basada en este compacto que logró venderse a lo largo de dos generaciones con bastante éxito hasta el año 2002 en Europa, motivos por los que carrozar un Fiesta Cube ya no tenía sentido aun ignorando la baja demanda que pudo tener esta versión.