Desde sus primeros años de existencia la estrategia de Henry Ford fue expandir su imperio industrial por todo el mundo. La compañía estableció su división en el país galo en 1916, llegando a producir el popular Ford T.
Para 1934 se establece Matford, una unión comercial entre la compañía de automóviles francesa Mathis y Ford, fabricando en Estrasburgo coches con motor V8 de cabeza plana de cilindradas de 2.225 y 3.621 centímetros cúbicos.
FORD EN FRANCIA TRAS LA SEGUNDA GUERRA MUNDIAL
Con la invasión alemana del país la fábrica de Estrasburgo cercana a la frontera germana se cierra y la producción se traslada a Colonia, además de abrir en 1940 una nueva factoría en Poissy, cerca de París.
Mientras tanto en Estados Unidos e inmersos en plena II Guerra Mundial, Edsel Ford, el único hijo de Henry Ford, y el diseñador Eugene T. Gregorie idearon un coche al que llamaron Ford ligero, planteado como un coche más pequeño que la gama de Ford de 1942.
El coche era demasiado pequeño y se terminó descartando para el catálogo americano tras la victoria estadounidense en la guerra y tras la muerte de Edsel Ford en 1943. Después de que Gregorie diseñase una nueva gama de modelos Ford para 1949, el Ford ligero se terminó fabricando en Francia con el fin de cubrir los costes de su desarrollo.
FORD VEDETTE, EL ÚNICO V8 FRANCÉS
El coche recibió el nombre de Ford Vedette y su diseño era muy similar al de la gama Mercury de 1948 pero en un tamaño mucho más reducido. Su mecánica era un V8 de válvula lateral heredado de los Matford de preguerra. Su cilindrada era de 2.158 centímetros cúbicos y desarrollaba 68 CV.
El Vedette se fabricó en Poissy y se convirtió en el único coche con una mecánica de ocho cilindros en uve fabricado en Francia. Las primeras unidades se hicieron en 1948, pero la precaria situación de la fábrica tras el conflicto hizo que Ford recurriese a empresas externas para la fabricación de varios componentes, lo que afectó seriamente a la calidad de construcción de los coches.
Al más puro estilo americano el coche estaba disponible en varias carrocerías: un sedán con trasera estilo fastback, que se terminó actualizando en la década de los 50 para ser un coche con una carrocería de estilo pontón, además de un coupé, un descapotable y un curioso sedán de cuatro puertas con techo de lona enrollable.
La reacción del público no fue la esperada, y el Vedette vendió en su mejor año, 1951, poco más de 21.000 unidades. Por esta razón en 1952 se presenta un modelo más básico del coche llamado Abeille, que significa abeja en francés, y que llama la atención por ser una versión destinada principalmente al transporte de carga, incorporando un curioso portón trasero de dos piezas, casi diez años antes de que el Renault 4 popularizase este concepto.
En 1953 es cuando se adopta la carrocería más moderna de estilo pontón, y frente a la variante básica y destinada casi al público rural, Ford introduce el modelo Vendôme, como tope de gama, más exclusivo y lujoso y que montaba un V8 llamado Mistral de 3.923 centímetros cúbicos y que desarrollaba 93 CV de potencia.
De esta versión del modelo se fabricaron algo menos de 3.000 unidades, convirtiendo al Vendôme en toda una rareza a día de hoy.
UNA PRODUCCIÓN REANUDADA POR SIMCA
Desde la cúpula directiva de Ford en Estados Unidos los resultados de ventas del Vedette no eran los esperados, entre 1948 y 1954 se habían producido 105.000 de estos automóviles. Como comparación la fábrica de la misma marca en Reino Unido había logrado fabricar más de 100.000 coches solamente en 1954.
En aquel momento la marca francesa Simca experimentaba un momento de enorme crecimiento, y buscaba expandir sus horizontes con la adquisición de una nueva planta de producción. Fue entonces cuando Simca y Ford se fusionaron, lo que dio como resultado la producción del Simca Vedette, que en algunos mercados continuó vendiéndose como Ford.
El diseño del Simca era mucho más moderno y refinado, en línea con las tendencias estéticas que llegaban de los Estados Unidos. Se mantuvieron el acabado básico con el Simca Vedette Trianon, el intermedio era el Vedette Versailles, y el más lujoso fue el Vedette Régence, que venía a sustituir al Ford Vendôme. También se introdujo una versión ranchera, el Vedette Marly.
La primera generación de Simca Vedette se fabricó entre 1955 y 1957, y en este breve periodo de tiempo logró igualar las cifras de producción del Ford, con otras 105.000 unidades vendidas.
El éxito llevó a desarrollar una segunda generación del Vedette, esta vez con un diseño aún más influenciado por los coches americanos del momento. La carrocería de la generación previa se siguió fabricando con un motor de cuatro cilindros y se llamó Simca Ariane, y aunque resulte lioso, posteriormente se pudo equipar con un V8, dando como resultado el Ariane 8.
Con la nueva carrocería la gama media correspondía ahora al nombre de Vedette Beaulieu y el tope de gama era el Simca Vedette Chambord. En 1959 se introduce un nuevo y exclusivo modelo que será el buque insignia de la marca, el Vedette Présidence, que se convirtió en el primer coche europeo en tener un radioteléfono incorporado.
El Présidence se convirtió en uno de los coches oficiales usados por el presidente francés Charles De Gaulle, que tuvo dos unidades descapotables de cuatro puertas construidas por el prestigioso carrocero Henri Chapron.
También en 1959 la producción de Simca se lleva al extranjero, concretamente a América del Sur donde se establece Simca do Brasil, y donde estos coches se fabricaron hasta 1966, cuando fueron sustituidos por el Simca Esplanada, que tenía una moderna carrocería, pero empleaba las mismas mecánicas V8 con algunas mejoras que incrementaban la potencia. También se llevó la fabricación a Australia, donde se fabricaron entre 1959 y 1962.
Finalmente, los Simca Vedette cesaron su producción en Francia en 1961, tras haberse fabricado 173.288 unidades, con otras 166.363 del Ariane cuya fabricación se alargó hasta 1963. Un éxito internacional para el que fue el único coche de motor V8 francés y que Ford no supo aprovechar.
Fotografías: Ford y Simca