Javillac
Los orígenes de la empresa Innocenti se remontan a finales del siglo XIX, aunque no sería hasta los años treinta del siglo pasado cuando la compañía de Ferdinando Innocenti se dedicaría a la fabricación industrial de tubos de acero.
No sería hasta después de la II Guerra Mundial cuando Innocenti se inicia en la producción de medios de transporte, presentando en 1946 un producto estrella e icónico, la Lambretta, una scooter económica, que junto a la Vespa, ayudaron a motorizar a Europa tras el conflicto.
En esa misma época también se dedicaron a suministras piezas para otras marcas de coches como Fiat, Alfa Romeo, Lancia y Ford.
1960: ENTRADA EN EL MERCADO DE AUTOMÓVILES CON BMC
Los británicos del grupo BMC, que englobaba a marcas como Austin, MG o Morris, ya habían establecido contactos con compañías italianas, diseñando en la década de los 50 algunos modelos con Pininfarina, como el Austin A40, considerado el primer compacto con portón trasero y que fue el primer modelo fabricado por Innocenti-Austin en dos versiones; Berlina y Combinata (familiar).
El segundo modelo de automóvil presentado por Innocenti fue el 950 Spider diseñado por Ghia, el equivalente italiano del Austin-Healey Sprite, empleando el mismo motor de 948 centímetros cúbicos que en 1963 pasaría a ser de 1.098 centímetros cúbicos, al que en 1967 se añadió una versión coupé.
En 1963 se presenta una versión exclusiva del mercado italiano de la popular plataforma ADO16 de BMC sobre la que se basaban coches como los MG 1100 o posteriormente los españoles Austin Victoria. El coche recibió el nombre de Austin IM3, y posteriormente se lanzaron las versiones IM3S, I4, I4S e I5.
1965: EL MINI LLEGA A INNOCENTI
El revolucionario compacto diseñado por Sir Alec Issigonis llegó a Innocenti, y la misma popularidad que tuvo en Reino Unido se trasladó a Italia, hasta tal punto que la firma italiana llegó a establecer una fábrica en Bélgica para fabricar este coche.
En Italia se fabricaron versiones del Mini como el emocionante Cooper, y variantes familiares del modelo, y que solían estar mejor construidas que sus homólogos británicos y contaban en muchos casos con más elementos de lujo. Para principios de los setenta la marca trabajaba en una nueva carrocería del coche diseñada por Bertone.
CAMBIOS EN LA DIRECTIVA: DE BRITISH LEYLAND A DE TOMASO
En 1966 fallece el fundador Ferdinando innocenti, y la empresa pasa a manos de su hijo Luigi, pero éste hizo una gestión de la misma que dejó mucho que desear. BMC había pasado a ser British Leyland a finales de los sesenta, y adquirieron Innocenti en 1972 en una transacción por un valor de 3 millones de libras.
Durante este tiempo con los ingleses al mando presentaron en 1974 el Innocenti Regent, la variante italiana del controvertido Austin Allegro, un modelo que se vendió durante dos años y que fracasó estrepitosamente en el país y que forzó la retirada de British Leyland de la compañía de Milán.
A principios de 1976 Alejandro De Tomaso adquirió la compañía que se renombró como Nuova Innocenti. Para aquel momento la marca ya había presentado su nuevo Mini de diseño Bertone, un modelo que sí consiguió cautivar al público italiano, recuperando el ritmo de producción anterior a la crisis interna, con 40.000 unidades anuales fabricadas en 1976.
El coche estaba disponible inicialmente con las mecánicas de 998 y 1.275 centímetros cúbicos heredadas de BMC, y a las que se les asignó el nombre comercial de 90L y 120L respectivamente. El 90L desarrollaba 43 CV que con los años aumentarían hasta los 49 CV, y el 120L rendía 63 CV que llegaron a ser 65 CV.
El moderno coche se llegó a plantear como el sustituto del Mini original en Reino Unido, pero después de que British Leyland se declarase en bancarrota en 1976 estos planes se descartaron.
En 1977 aparece en el mercado el Innocenti De Tomaso, la versión más deportiva del modelo que contaba con un kit de carrocería con diversas mejoras y que desarrollaba 71 CV, y a partir de 1978 su potencia subió hasta los 74 CV.
El Innocenti Mille se presentó en 1980, y venía sustituir a los 120L en muchos mercados, aunque también hubo versiones 90 LS y 90 SL. En 1982 el acuerdo de Alejandro De Tomaso con British Leyland había acabado, y ya no proporcionarían motores a una marca que ahora consideraban de la competencia.
ERA DAIHATSU
Con De Tomaso al mando se hicieron muchas pruebas para encontrar un candidato a ser el próximo motor del Innocenti. El elegido fue un bloque de tres cilindros del Daihatsu Charade y que estuvo disponible en cilindradas que iban entre los 548 y 993 centímetros cúbicos. También se llegó a ofrecer un bloque bicilíndrico de 617 centímetros cúbicos.
Este acuerdo con Japón fue posible gracias a la colaboración que Alfa Romeo y Nissan llevaron a cabo con el Arna, que acabaron con las reticencias del gobierno italiano a que el país nipón fuese un proveedor de mecánicas.
Los motores eran sustancialmente más caros que las unidades de BMC, pero Alejandro De Tomaso logró sacarles rentabilidad gracias a la fiabilidad su fiabilidad, que redujo las reclamaciones de coches en garantía en un 70%.
Durante esa época, también hubo una versión deportiva, el Innocenti Turbo De Tomaso, que con el bloque de 993 centímetros cúbicos lograba desarrollar 72 CV. También con la misma cilindrada hubo una variante de gasoil más económica que coches como el Fiat Panda y Punto diésel, sus principales competidores.
1990: LA COMPRA DE FIAT Y EL PRINCIPIO DEL FIN
Al iniciar la década de los noventa Alejandro De Tomaso vende la compañía a la empresa que había sido su principal competidora, Fiat, y con este acuerdo, los días de Innocenti estaban contados. Unas de las primeras medidas fue acabar con muchas de las variantes de la gama como el Turbo y el diésel.
La fabricación de coches Innocenti cesó en 1993, pero el nombre logró sobrevivir hasta 1996, con coches traídos de otros mercados con coches como los Yugo y Fiat brasileños que se vendían bajo esta marca, marcando así el final de un fabricante que hizo del Mini algo muy grande.
Fotografías: Innocenti
