Tradicionalmente, Maastricht abre el fuego inaugurando la temporada de salones clásicos europeos con su InterClassics and TopMobiel celebrado en las grandes instalaciones MECC a las puertas de la ciudad, al lado de la autopista A2 que conecta los Países Bajos con Lieja, ciudad industrial de Bélgica que en otro tiempo albergó la fábrica de automóviles FN.
La presente edición tuvo lugar del 17 al 19 de enero de 2014 con el aliciente especial de una exposición dedicada al centenario de Maserati. Si 2013 fue el año del cincuentenario del Porsche 911, 2014 regalará a los aficionados un aluvión de celebraciones en torno a la marca del tridente. No obstante, Erik Panis, director de la exposición y Maarje Janssen, responsable de prensa, recordaban a este cronista que otros temas principales aguardaban a los visitantes del MECC, como la presencia del Ford Mustang en el cine o las leyendas de la competición de antes de la guerra.
Llegando por el sur, como sería lógico en los viajeros procedentes de España, y en caso de elegir el coche como medio de transporte, sería necesario atravesar Bélgica. Las autopistas belgas, que fueron un orgullo nacional por su modernidad y su iluminación nocturna exclusiva, han entrado en una fase de deterioro alarmante que las hace incluso peligrosas por la proliferación de grandes agujeros en el asfalto que los belgas denominan humorísticamente «nidos de gallina».
1- En cualquier rincón de I&T hay grandes sorpresas, como este Invicta de 1929
2- Este Alfa Romeo 1900 CSS Boano de 1955 es un ejemplar único
En ocasiones, los nidos son tan grandes que en ellos cabe la rueda de un turismo, con las consecuencias que pueden imaginarse. Al viajar por éstas me permito aconsejar a los automovilistas que estén a la escucha de la radio, ya que las principales emisoras informan puntualmente de los tramos de carreteras deteriorados, con su localización kilométrica.
UN MERCADO EN ASCENSO
El enfrentarse con las dificultades de la ruta tiene su recompensa al acceder a InterClassics and TopMobiel, un salón bien cuidado, de excelente presentación y que ha seguido durante los últimos años la expansión general registrada en el mundo de los coches clásicos.
Recordaremos que, según las conclusiones de un seminario celebrado en Beaulieu (GB) en el mes de diciembre de 2013, en los últimos seis años el mercado de coches clásicos ha registrado un aumento de un 160%, cifra que derrota los mejores resultados de cualquier bolsa del mundo. En el seminario participaron expertos en el comercio de coches clásicos, pero también periodistas, directores de museos y representantes de firmas especializadas en ese sector de actividad.
En lo que al mercado se refiere, Maastricht sirve para observar si se confirman los resultados de la temporada anterior o si se espera un cambio de tendencia en los próximos meses. Más adelante mencionaremos algunas cifras de precios de vehículos representativos de la actividad general.
1- El Ferrari 250GT Boano Ellena, en otros tiempos devaluado, empieza a situarse a un nivel de precios similar a sus congéneres
2- Réplica de Ferrari Testarossa sobre base 250GT Boano. Ya hablaremos de esto después…
Protagonistas europeos
Empezaremos por destacar la presencia en el salón de comerciantes de prestigio internacional como la Houtkamp Collection, The Gallery, Classic Park y Movendi, entre otros, así como la de restauradores que se distinguen por sus realizaciones de gran calidad (y precios en consecuencia), como Bart Holland, que trabaja con todas las marcas, o Classic Car Venlo, que se centra en las restauraciones de coches Mercedes-Benz, en los modelos 190SL y 300SL.
El 190SL que no hace mucho tiempo estaba considerado como un coche de dama (los alemanes lo llamaban «Damen» por su modesto motor y relativamente escasa potencia), no se encuentra en la actualidad por debajo de los 100.000,00 euros en caso de restauraciones bien ejecutadas. Es cierto que su bastidor tubular y su elegancia de líneas lo hacen atractivo y que puede ser el sustituto ocasional de los inalcanzables 300SL cuya cotización cuadruplica o quintuplica la de su hermano menor.
Justo frente a la entrada principal de InterClassics, la Houtkamp Collection deslumbra a los visitantes con su marca de casa, que suele ser un Aston Martin. En esta ocasión se trataba de un DB5 de 1965 que, por una vez, se ha escapado de la moda de pintarlos en gris metalizado, siguiendo la pauta del coche del agente 007 en Goldfinger.
1- Una de las estrellas que más brillaron en el salón, flamante Aston Martin DB5
2- Lancia Flaminia Zagato vendido en el acto por The Gallery
Francamente, en Old English White, el DB5 resulta de una gran elegancia, sobre todo después de una restauración del nivel acostumbrado en los productos a la venta de la Houtkamp Collection. El precio del DB5 no estaba indicado porque, como sabemos, quien tenga necesidad de preguntar el precio es porque no podrá pagarlo. Sin embargo, el mismo comerciante vendía otro Aston Martin, un DB2/4 MKII de 1956 por 169.500,00 euros.
Movendi, por su parte, ponía a la venta un Austin Mini Cooper S de 1963, en su cotizada versión 1071 que, sobre el bastidor número 18658, mimetizaba los Mini del rally de Monte Carlo. El precio de 53.000,00 euros no lo pone al alcance de todo el mundo. Con ese precio, el Mini ya iguala a los mejores Porsche 911 3,2 con caja de velocidades G50 y bajo kilometraje, que se negocian en torno a esa cifra.
En el bien nutrido stand de The Gallery, donde se podían pasar agradablemente un par de horas, a los pocos minutos de abrirse las puertas del salón ya había vendido varios coches interesantes, entre ellos un Lancia Flaminia Super Sport Zagato y un Maserati 3500 GT. En el centro del stand destacaba un bonito 246GT Dino amarillo, cuyo número de bastidor es el 02184.
1- Los Mini ya pasan de los 50.000,00 euros, al menos si incorporan algunos extras
2- El 246GT Dino presentado por The Gallery
Como cifra de referencia muy reciente, la casa de subastas Gooding and Co. adjudicaba durante el mismo fin de semana del mes de enero de 2014 en la venta de Scottsdale un 246GT amarillo, bastidor 03978, por 291.500,00 dólares; pero, en la misma venta, otro 246GT gris metalizado, bastidor 04946, se adjudicó por 473.000,00 dólares, poniendo el valor medio de los Dinos en situación estratosférica.
La antes mencionada firma Classic Park vendió casi en el acto un Porsche 356 Roadster D’Ieteren por 159.950,00 euros. Cierto es que se trataba de uno de los primeros ejemplares identificado como T5, con una rejilla de ventilación en el motor como signo distintivo externo y una potencia de 75 CV (en lugar de los 90 CV de los T6 que lo siguieron). Los buenos Roadster D’Ieteren o los equivalentes Convertible Drauz están aproximándose a las cotizaciones de los mejores 356 Speedster, lo cual es lógico ya que son coches mejor equipados y más cómodos que éstos.
Los compradores de 356 buscan algo más de confort que el ofrecido por el Speedster, ya que el D’Ieteren o el Drauz ofrecen una capota de verdad con cristales laterales, mejores asientos, interior más lujoso y mejor protección contra las inclemencias del tiempo.
1- Minicoche a maxiprecio, FIAT carrozado por Motto
2- Tremendo trío de ases FIAT Abarth, a elegir en todos los estados imaginables
Numerosas rarezas
Entre los numerosos expositores que ocupaban los 33.000 metros cuadrados de superficie disponible (con aumento de 3.000 metros cuadrados respecto a la edición anterior), los 22.000 visitantes que se esperaban podían encontrar muchas otras sorpresas como, por ejemplo, un raro FIAT Mille Miglia de 1951 carrozado por Motto, del que sólo se fabricaron siete ejemplares. A pesar de su modesto motor de 4 cilindros y 500 cc, su precio era de 110.000,00 euros. Cierto que por su línea muy ligera y deportiva podría calificarse de mini Ferrari.
Posiblemente uno de los conjuntos más interesantes era el compuesto por tres FIAT Abarth con ligeras carrocerías de Zagato. Uno de ellos en estado original, sin restaurar, tal como fue recuperado tras 24 años de abandono, acompañado de otros dos en perfecto estado, listos para atacar cualquier rally o circuito y medirse con vehículos de mayor precio y cilindrada.
El coche sin restaurar, denominado Sestriere, está en venta por 31.500,00 euros, mientras que los restaurados, de 1960 con bastidor número 708145 y de 1964 con bastidor 1100390, se vendían por 85.000,00 y 85.500,00 euros, respectivamente.
1- Alpine-Renault 1600 S, cotizado a casi cien mil euros
2- La noción de sobrerestauración o de restauración excesiva no existe tratándose de un Corvette.
Los Alpine-Renault han confirmado su tendencia al alza con ejemplares con historia en competición que han sorprendido al alcanzar resultados en subasta del orden de los 200.000,00 euros. Un 1600 S de 1972 en excelente estado de presentación estaba dispuesto a cambiar de manos mediante previo pago de 98.000,00 euros.
A pocos metros de distancia se podía admirar un Chevrolet Corvette cabriolet, que ilustra lo que puede llamarse un coche en estado de concurso, como nuevo en cada detalle. Con una típica pintura bicolor apropiada a su época, fabricado en 1957 y en venta por 89.500,00 euros.
En la categoría de coches poco vistos, podríamos destacar un espléndido BMW 502F cabriolet de 1956 cuyo capó cobija un potente motor V8; así como un NSU Kohlmus, posiblemente el mejor ejemplar de los pocos fabricados entre 1969 y 1973, perfectamente restaurado por Bart Holland desde el primer al último tornillo. Con sus puertas en alas de gaviota y su motor trasero recuerda a algo entre un Mercedes-Benz 300SL y un mini Lamborghini.
1- El público joven y menos joven se interesaba por el NSU «alas de gaviota»
2- Stirling Moss fue en busca de El Dorado en Monza
El amplio y lujoso recinto dedicado al centenario de Maserati encerraba 30 coches de la marca, representantes escogidos de museos y colecciones de particulares. Sería imposible detallar todos ellos y me permito destacar por su rareza un modelo de competición y un GT. El 420M Eldorado con el que Stirling Moss participó en Monza en 1958 era muy admirado por el público, al igual que también lo era uno de los cotizados A6GCS carrozados en 1953 por Pinin Farina. Respecto a este último, se trata del bastidor número 2056 y es el ejemplar que reside en el Museo Panini.
Finalmente, los coches de carreras de antes de la guerra ponían un broche de oro a la amplia muestra ofrecida por los organizadores de InterClassics and TopMobiel, estando entre los más espectaculares un Volpi de 1934 con motor Cadillac V16 y un Bugatti T54 de 1931.
SUBASTA DE COYS Y OTRAS INFORMACIONES DE INTERÉS
Otro aliciente que es preciso destacar era la subasta organizada por Coys el sábado día 18 de enero, por la tarde, en la que naturalmente no faltaban los Maserati y una nutrida selección de coches británicos, Jaguar XK e, incluso, un llamativo Ferrari 250 que inició su vida como GT carrozado por Boano para ser transformado más tarde en copia de un Testa Rossa de competición. Para que nadie se llame a engaño y evitar que le den gato por liebre, su bastidor es el número 0611GT.
1- El stand del Club Bugatti siempre encierra grandes alicientes. En la foto un Tipo 57 que no ha cambiado de familia desde que era nuevo
2- El morro del Volpi es alargado, tiene que albergar 16 cilindros. Detrás, Bugatti T54 de 1931
En La Escudería nos preguntamos cuál puede ser el interés real de destruir la originalidad de un coche para transformarlo en una copia de lo que no es y nunca será. La paradoja, incluso económica, podrá plantearse en un futuro no muy lejano cuando los modestos coches donantes hayan desaparecido en cantidad significativa y los pocos que queden en estado original puedan alcanzar un valor muy superior a los que se transformaron en réplica con un dispendio de dinero inútil.
Otros ejemplos de precios de coches en venta en perfecto estado (por orden de fecha de fabricación):
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• Jaguar XK 120 roadster 1951, 105.000,00 euros;
• Alfa Romeo 1900 SS 1957, 147.500,00 euros;
• Porsche 356 Speedster 1959, 165.000,00 euros;
• Fiat Dino Spider 1968, 59.800,00 euros;
• Porsche 911 T 1970, 60.000,00 euros;
• Jaguar-E SIII V12 1973, 89.500,00 euros;
• Porsche 911 3,2 Speedster 1989, 45.000 Km, 119.000,00 euros;
• Ferrari Testarossa 1992, 36.000 Km, 62.350,00 euros.
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Libros, modelos, galería de arte y complementos llenaban el espacio disponible dejado por los coches en todo el perímetro de la feria internacional MECC.
El precio de la entrada a 17,00 euros por persona (incluyendo un magnífico programa gratuito que es en realidad una revista de 92 páginas) y de 10,00 euros por aparcamiento de un coche durante toda la jornada, parecen bien empleados en una visita al salón de Maastricht.
Valoración
INTERÉS DESDE EL PUNTO DE VISTA…
del automóvil histórico: | 9/10 |
de mercado de piezas y complementos: | 6/10 |
del modelismo: | 9/10 |
Confort de las instalaciones: | 10/10 |
Comunicaciones, accesos, facilidades hoteleras: | 9/10 |
Atención al público: | 9/10 |
Presentación, ambientación, acceso a los stands: | 9/10 |
INCONVENIENTES: Lejos de las fronteras españolas (pero también comunicado por vía aérea). Largas colas que se forman en las taquillas entre las diez y las doce de la mañana.