Javier Romagosa
[dropcap]E[/dropcap]Edward John Barrington Douglas-Scott-Montagu, el Barón Montagu de Beaulieu, murió hace apenas una semana. Este aristócrata inglés fue uno de los principales impulsores del movimiento por la preservación de los vehículos antiguos, además de pionero en la creación de museos, ferias y revistas dedicadas al tema.
Lord Montagu nació en 1926 y perdió a su padre, pionero de la automoción que desde su posición social había luchado por la defensa de los derechos de los automovilistas, a la tierna edad de dos años. Volvería a él veinte años más tarde, cuando en su memoria decidió transformar la formidable residencia familiar en uno de los primeros museos de coches clásicos del mundo.
Edward Montagu y su museo
Con el tiempo éste llegaría a ser el British National Motor Museum -Museo Nacional Británico del Motor-, con unos fondos ingentes además de una tremenda biblioteca/archivo. Pero no adelantemos acontecimientos: Lord Montagu comenzó su proyecto con apenas un DeDion-Bouton 6HP de 1906 y otras máquinas añejas prestadas por las marcas automovilísticas.
En 1956 editó una de las primeras revistas sobre coches clásicos, la Vintage and Veteran, la cual con el correr de los años se convertiría en la famosa Classic Cars. Y en 1967 inauguró un concepto traído de América pero sin duda popularizado en la campiña inglesa: En dicho año se llevó a cabo la primera edición del Autojumble de Beaulieu, prototipo de las ferias de venta e intercambio al aire libre que todavía hoy atrae a cientos de miles de visitantes en cada edición.
Todo lo que rodea a la residencia familiar, el Palace House, y a la Abadía cisterciense de Beaulieu es hoy un santuario dedicado a los vehículos añejos que ningún aficionado debería dejar de visitar al menos una vez en la vida. Es una mezcla de arquitectura antigua y moderna y de maquinaria de otras épocas que resulta fascinante.
Finalmente, en 1962 Lord Montagu constató la dificultad de los propietarios de coches clásicos para obtener neumáticos adecuados y cofundó la Vintage Tyre Supplies, a día de hoy una de las grandes empresas del sector a nivel mundial.
Los juicios de Montagu
Pero no todo serían alegrías para él. Entre 1953 y 1954 fue juzgado y condenado por practicar la homosexualidad. Su caso sirvió para el establecimiento del Comité Wolfenden, que con un importante informe contribuyó a que esta condición sexual fuese despenalizada una década después. Edward Montagu nunca ocultó su bisexualidad aunque no hizo gala de ello, se casó con dos mujeres distintas y tuvo dos hijos.
Lord Montagu también participó activamente en el deporte del automóvil, editó 21 libros, ocupó su asiento hasta su muerte en la Cámara de los Lores y promovió con éxito el patrimonio turístico británico. Descanse en paz.
*Foto de cabecera: Allen Warren
