El último Opel Diplomat A V8

Sí, la marca alemana llegó a montar el brutal V8 Small Block de Chevrolet en sus coches y el exclusivo Opel Diplomat A V8 Coupe es un ejemplo de ello. Esta unidad que ves es un tanto especial… Bueno, de hecho todos los Diplomat en realidad lo fueron, ya que la firma solo llegó a fabricar 347 unidades de esta potente y lujosa «berlina». Pero la unidad que os presentamos aquí, además, fue el último ejemplar de los pocos fabricados entre 1964 y 1967 por el conocido carrocero Karmann, a quien Opel derivó su manufactura.

Imágenes cedidas por Opel

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Poderío alemán

De mover su portentosa carrocería se encargaron varias motorizaciones de seis y ocho cilindros. El primer grupo lo formaban un 2,6 l. de 100 CV y un 2,8 de 125, mientras que el segundo estaba integrado por mecánicas V8 de Chevrolet en versiones de 4.600 cc, la cual rendía 190 CV e iba unida a una caja automática Powerglide de solo dos relaciones; y de 5.400 cc, esta última procedente del musculoso Corvette y traída directamente de EE.UU. En 1965, el exclusivo modelo alemán con carrocería coupé costaba unos 25.500 marcos y era capaz de bramar a nada más y nada menos que 230 CV; junto con 427 Nm de par, conseguían propulsar a este Opel Diplomat A V8 Coupe de dos puertas a una velocidad máxima de 206 km/h.

Pero a lo que íbamos, el fabuloso e impoluto Diplomat A V8 que ves en las fotografías participará en la próxima edición del tour Bodensee Klassik (web), que dará el pistoletazo de salida en Austria y recorrerá partes de Alemania y de las vecinas Suiza y Austria. Pero, quizá, uno de los datos más curiosos es que al volante de la criatura estará su dueño: el señor Karl-Thomas Neumann… Exacto, el CEO de la marca.

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Neumann, el orgulloso propietario del último Opel Diplomat A V8 Coupe, guarda y cuida su joyita desde hace solo escasos seis meses. Está claro que no hay mejor forma de representar a tu propia compañía y cuasi estrenar esta lujosa reliquia que participar en un rally de clásicos de primer nivel, ¿no crees?

Por cierto, el señor Neumann tuvo ya en 2013 la oportunidad de probar la gama KAD o, lo que es lo mismo, los tres grandes de Opel: el Kapitän, el Admiral y el Diplomat. ¿Es posible que fuera entonces cuando cayó prendado del Diplomat V8?

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