Tan divertido como revolucionario en su construcción el Citroën Mehari hizo historia por su carrocería de plástico, pero esta innovación fue obra de una compañía ajena al sector del automóvil y conocida como SEAB.
Aunque comercializar un modelo de otra marca bajo licencia puede ser una gran idea para Honda fue toda una pesadilla vender el Land Rover Discovery en los noventa por problemas de calidad.
Aunque Lancia había abandonado las pruebas de resistencia para centrarse únicamente en la F1, Alberto Ascari pidió la construcción de este modelo para intentar la victoria en la Panamericana de 1955.
Creado por la marca de lujo estadounidense Pierce-Arrow en 1913 el motor de 13,5 litros equipado en Model 66 se convirtió en el motor montado en un coche producido en serie más grande de todos los tiempos.
Basado en un equipamiento más sencillo, el Mercedes 180E buscó eludir el impuesto de lujo para poder ser así competitivo dentro del mercado australiano.
Presentado en 1986, el Volkswagen Scooter fue uno de los prototipos más únicos jamás fabricados por la compañía al ser un compacto con aspiraciones deportivas y una particular configuración de tres ruedas.
Con carrocerías tres volúmenes y «break» este Simca cuenta con una amplia oferta de acabados y motorizaciones entre las cuales escoger la versión más ventajosa a la hora de disfrutarlo como clásico.
Ya está en marcha una nueva edición de uno de los festivales de clásicos más apasionantes del mundo en el que podremos disfrutar de nuestros dos bicampeones del mundo.
En el panorama de preparadores basados en modificar unidades de los SEAT 124 y 1430 destacó Ddauto gracias a su capacidad de fabricar en serie; algo que quiso completar con el desarrollo de un equipo de competición propio.
Cuando creíamos que ya lo habíamos visto todo, resulta que también pueden aparecer abandonados coches de carreras, tal y como os contamos a continuación.