Siempre es una buena noticia que una nueva feria dedicada a los vehículos clásicos comience su andadura en nuestro país. Este primer Retro Málaga se celebró entre el 7 y el 9 de Marzo en el Palacio de Ferias y Congresos de la ciudad andaluza, de la mano de la empresa Eventos del Motor
y para tratarse de un estreno no defraudó.
A pesar de las dudas que siempre genera una primera edición, nada más entrar en el moderno y luminoso recinto se podían ver cosas interesantes y variadas. La bienvenida la daban, por ejemplo, un Mercedes 300 SL y un moderno SLS, ambos con sus “alas de gaviota” abiertas. La unidad antigua era uno de los coches que el Museo Automovilístico de Málaga desplazó al evento.
Una vez en el interior, la feria estaba dividida en dos pabellones comunicados, uno dedicado a los expositores propiamente dichos y el otro a parking para los clásicos de los visitantes. Este aparcamiento a cubierto animó mucho el salón y permitió ver una gran cantidad y diversidad de vehículos que además iban variando con el paso de las horas, pues unos se iban yendo mientras otros llegaban.
Integrar el parking gratuito de clásicos en el interior de la feria fue una buena idea
Sin duda fue una gran idea esto de permitir la entrada al interior del recinto a los coches antiguos traídos por particulares, por diversos motivos: porque aportaba un colorido que normalmente se queda “de puertas a fuera”, y porque además cualquiera podía exponer su tesoro a la venta con el solo coste del desplazamiento hasta allí.
De este modo en el pabellón había de todo: Muchos clásicos populares, algún preguerra suelto e, incluso, cosas exclusivas como un pobre Citroën SM con pintura mate y algún otro “tuneo” improcedente, aunque la tónica general eran coches restaurados conforme a lo original y de buena presencia.
De entre lo expuesto de manera “estática” en el pabellón adyacente es también destacable lo variado y numeroso del género: stands de restauradores, clubes de zona o marca, piecerío diverso o papel… prácticamente de todo.
1- Bonita réplica de una barqueta Ferrari de los años 50
2- Rarísimo Zagst Coupé, sobre base Fiat 600
Se sucedían los espacios de motos y los de automóviles sin ningún orden concreto, y en cualquier rincón uno podía encontrarse una unidad llamativa, como la bonita réplica de una barqueta Ferrari de los años 50 casi escondida entre expositores de recambios.
Buena variedad
De entre toda la variedad presente es difícil destacar algo en concreto: desde un antiguo Fórmula 1430 disfrazado con los colores de Lotus hasta un rarísimo Zagst Coupé con base Fiat 600, pasando por el Aston Martin DB4 del Museo de Málaga o la gran cantidad de “haigas” americanos diseminados en varios stands.
Los clubes también desplazaron buen material, como el dedicado a los Renault populares de los años 60 y 70, con varias unidades en muy buen estado, o el stand del Club de Automóviles de Época de Málaga, con tres imponentes autos americanos de la época de la “Ley Seca”.
1- Populares de buena presencia en uno de los clubes de Renault
2- La nota monstruosa la ponía el John Dodd, con motor de avión
Es destacable la cantidad y variedad de coches estadounidenses presentes en esta feria malagueña, entre los que tenían protagonismo los Ford Mustang de diversos modelos reunidos en el centro del pabellón para celebrar el 50 aniversario de la presentación de este mítico modelo. Afortunadamente no había ninguna unidad de las actuales, cosa que hasta ahora venía ocurriendo en otros salones de vehículos clásicos.
También hubo bastante espacio dedicado a las motos de todo tipo, aunque debemos señalar la gran cantidad de Guzzi del modelo 65cc que había, pues llegamos a contar alrededor de 15 unidades e incluso un club sorteaba una entre los asistentes.
En definitiva parece Retro Málaga que ha comenzado con buen pie, cosa que sin duda se merece la comunidad andaluza, hasta ahora carente de un evento de estas características. Iniciativas novedosas como el parking gratuito y a cubierto para clásicos o la posibilidad de adquirir una entrada “pack” museo+salón que abarataba ambas visitas son dignas de aplaudir.
Suponemos que los visitantes –entre los que se podían ver y escuchar a muchos extranjeros, como no podía ser menos en la Costa del Sol- se fueron bien contentos a casa tras la visita de la que podría ser la feria referente de Andalucía, si es que en siguientes ediciones se continúa con el buen rumbo iniciado en este 2014.