FOTOS RANGE ROVER VOGUE: SOUP CLASSIC MOTORING
Esta noticia no es el lugar ni el momento para hablar sobre los SUV. Sin embargo nos ha asaltado una reflexión. Porque, ¿realmente es un fenómeno tan nuevo? Nosotros pensamos que sí, aunque con ciertas notas al margen. Vale que allá por el 2002 -justo en el apogeo de la burbuja financiera- fue cuando las carreteras se plagaron de X5, Cayenne y Touareg, pero… ¿Aparecieron de la nada? Realmente no.
Y es que si nos remontamos hasta 1970 encontraremos los primeros Range Rover. Y antes, los Ford Bronco y Jeep Wagoneer. En fin, no queremos decir ni mucho menos que éste sea un SUV pero lo que sí está claro es que en él se aunaba a la perfección la versatilidad de un todoterreno con la comodidad de una berlina. Una fórmula a priori imposible que a partir de 1981 se confirmó del todo gracias a las primeras versiones cuatro puertas.
Así las cosas, resulta que envolver un interior de lo más civilizado en la maquinaria de un vehículo apto para tierra y asfalto no es precisamente algo tan reciente. Eso sí, en el caso del Range Rover hay que anotar un punto a favor de éste: es toda una fiera en el campo. Algo que no pueden decir muchos de los actuales SUV, cuyo aspecto todoterreno se debe más a las metas aspiracionales del comprador que a su realidad tecnológica. En fin, mira este vídeo y juzga por ti mismo.
A pesar de su dureza, incluso un Range Rover llega a acusar el paso del tiempo. Más aún si lo metemos por agrestes y húmedos caminos. Por ello suele ser común la aparición de óxido y corrosión, lo cual obliga a una restauración minuciosa desmontando, limpiando, repintando e incluso completando algunas de las partes originales. Un proceso contra el tiempo que, en el caso de este Range Rover Vogue, tenemos muy bien documentado.
SOUP CLASSIC MOTORING. TUTORIALES PASO A PASO
Cuando uno entra en la aventura de adquirir un clásico suele ir con buena voluntad y amplias dosis de confianza en sí mismo. En ese sentido es muy habitual escuchar cosas como “estos arreglitos los puedo hacer yo en mi casa”. Obviamente la realidad es muy diferente, por lo que de repente te ves con montones de óxido creciendo al ritmo de tu desesperación.
Por fortuna hoy en día existe Internet. Un lugar donde hasta el modelo más extraño suele tener su foro con aficionados dispuestos a echarte una mano. De hecho, incluso algunos se han lanzado a la aventura de grabar tutoriales gracias a los cuales te ves haciendo cosas que de otro modo no habrías aprendido. Justo el caso del mecánico irlandés que se esconde tras el canal Soup Classic Motoring. Todo un manitas que lo mismo reconstruye un Lotus Espirit como deja de capricho este Range Rover Vogue.
Eso sí, grabando y explicando todo el proceso a través de la técnica del “stop motion”. Sí, lo mismo que siempre se ha utilizado para películas de animación con muñecos pero ahora puesto al servicio de la pedagogía del motor. En total hay casi una hora y media de grabación con el Range Rover como protagonista, destacando las partes en las que vemos cómo reconstruir el perfil de piezas comidas por el óxido.
RANGE ROVER VOGUE. LUJO CAMPESTRE
La genealogía del Range Rover tiene multitud de variantes. Algo lógico en una gama que, a través de diferentes evoluciones, viene conservando nombre y concepto desde 1970. No obstante, la que ha quedado como la generación más representativa es sin duda la primera. Los “tiempos dorados” del Range Rover. Muy lejos de su situación actual en la que versiones como la Velar son más una variante del Jaguar F-Pace que un modelo con entidad propia.
Respecto a motorizaciones había de todo. Desde los clásicos V8 Rover diseñados en principio por General Motors hasta los diésel de la italiana VM Motori, el Range Rover contó con numerosos ingenios. Eso si, podías vestirlos con acabados tan refinados como el Vogue.
La mayor parte de estos modelos corresponden a comienzos de los 90, por lo que ahora empiezan a adquirir un interesante estatus de “youngtimer”. Algo que seguramente va a animar su posición en el mercado, aunque visto lo visto… Te recomendaríamos un buen vistazo en busca de indicios de óxido si estás viendo alguno. Más allá de eso, en el vídeo prácticamente no vemos trabajo de mecánica o motor. Así que sí, el Range Rover sigue teniendo su fama merecida: es un coche muy duro.