En 1986, la FISA prohibía la categoría Grupo B dejando huérfano al Mundial de Rallies de algunas de sus creaciones más espectaculares. Entre ellas, el Renault 5 Maxi Turbo, la última evolución de un modelo que había cautivado la imaginación de los aficionados como pocos. La marca del rombo seguiría corriendo con los R11 y R5 GT Turbo, pero nunca llegaría a desarrollar una máquina a la altura de los míticos R5 Turbo. O eso se pensaba hasta ahora, pues resulta que existió un Renault 19 Quadra Turbo que pudo haberlo cambiado todo.
Hablamos de un modelo desarrollado a principios de los 90 en Renault-Berex, la Oficina de Estudios e Investigaciones de la marca francesa. Se trataba de un departamento rodeado de cierto misterio y secretismo, que sin embargo fue clave en los planes deportivos de Alpine y Renault en la época. Con casi 120 técnicos e ingenieros, allí se desarrollaron proyectos como el Alpine A310 V6 Fase 2 o el Renault 5 Turbo, por ejemplo.
Se mantuvo en activo entre 1979 y 1992, año en el que se fusionó con el Centro Técnico de Villiers, para cerrarse definitivamente en 1995. Por lo tanto, a buen seguro el Renault 19 Quadra Turbo que nos ocupa fue uno de sus últimos proyectos, junto con los recordados Renault Clio Williams y Safrane Biturbo.
EL RENAULT 19 QUADRA TURBO
Vamos ahora con nuestro protagonista, un modelo de competición que debería haber dado el salto al Mundial de Rallies para competir con los Ford Escort RS Cosworth, Toyota Celica Turbo 4WD, Lancia Delta HF Integrale y similares. Es decir, se trataría de una vuelta a la competición por todo lo alto, sin medias tintas, lo cual exigía el empleo de tracción total y una mecánica a la altura.
Respecto a la tracción integral, el Renault 19 ya fue diseñado con un túnel central pensado para acoger versiones 4×4. De hecho, el R21 ya disfrutaba de variante con dicha configuración denominadas Quadra. Aunque el R19 de calle no llegó a aprovechar el citado túnel central, sí lo hizo nuestro protagonista, que contaba con tracción 4×4 como todos sus teóricos rivales en el mundial. No obstante, al parecer también se desarrolló una segunda versión con tracción delantera, quizá pensando en la categoría 2 Litros. En ambos casos se usó como base la carrocería de tres puertas.
En lo que se refiere a la motorización, se eligió un motor 1.8 turbo con doble árbol de levas en cabeza y código interno F7P. Era la mecánica que equipaban los R19 y Clio 16V y que, en versión de serie rendían 140 y 137 CV respectivamente. Para el prototipo con tracción delantera se evolucionó hasta conseguir que la caballería alcanzada una cifra cercana a los 190 CV. En el modelo Quadra, se contaba con superar los 300 CV para poder competir de tú a tú con el resto de los Grupo A. Tanto uno como otro montaban una caja de cambios de seis relaciones.
UN ASPECTO SALVAJE
Si hay algo que cautive del nonato Renault 19 Quadra Turbo es su desarrollo estético o, más bien, aerodinámico. Porque sin llegar a los excesos del Maxi Turbo, lo cierto es que su aspecto es, cuanto menos, intimidante. Y eso que vemos el lado derecho, el menos exagerado, ya que, según se cuenta, la parte izquierda era una auténtica brutalidad. Empezando por la que vemos, el ensanchamiento es toda una declaración de intenciones y serviría para acoger unas vías de mayor tamaño. Además, cuenta con una entrada de aire para refrigerar los frenos traseros.
Si nos fijamos en la parte posterior, en el lado izquierdo podemos ver un alerón con un lateral que cae hasta abajo. Sin duda, una pista de la radicalidad de esa propuesta. Es lógico que se ensayaran ambas versiones en una única unidad, ya que abaratan los costes de desarrollo. Los pilotos traseros son una evolución de los presentados en el R19 Fase 2, aunque en estilo “coast to coast”.
Finalmente, el proyecto del Renault 19 Quadra turbo para rallies se canceló. Nada se sabe de qué fue de los dos prototipos, ya que solamente se conocen las dos imágenes que publicamos que aparecieron en una revista francesa. Al parecer, la segunda unidad, la que tenía tracción delantera, estaba pintada en rojo. Una pena, porque lo cierto es el ejemplar fotografiado era una barbaridad, digno heredero de los Renault 5 Maxi Turbo.