Hace tan sólo unos días Rétromobile París 2024 ha clausurado su 48ª edición tras haber atraído a multitud de marcas y empresas, movido millones de euros en subastas y, obviamente, encandilado a una afición formada por decenas de miles de visitas. Por cierto, todo ello con una evidente atención al mundo de la competición así como una interesante presencia de vehículos previos a la Segunda Guerra Mundial.
Así las cosas, la cita parisina vuelve a confirmarse como una de las ineludibles del calendario mundial, siendo uno de los mejores lugares a fin de admirar auténticas piezas de museo pertenecientes a lo más exclusivo de la historia automovilística. En suma, realmente merece la pena a pesar del necesario viaje.
No obstante siempre quedarán las crónicas periodísticas y, por lo que a nosotros respecta, esta vez haremos un breve repaso por los modelos más destacados de este Rétromobile París 2024. Dicho esto lo primero en lo que repararemos será el ámbito de las subastas, donde las mejores firmas han realizado transacciones en las cuales las cifras resultantes están, evidentemente, a la altura de lo ofertado.
SUBASTAS EN RÉTROMOBILE 2024, CIFRAS SATISFACTORIAS
Desde RM Sotheby’s hasta Bonhams pasando por Gooding & Company los pabellones del Rétromobile han congregado a lo más granado de las casas de subastas a nivel internacional. Obviamente el nivel de sus lotes ha sido bastante alto y, a la hora de resumir, quizás el más significativo de todos ellos haya sido el del Ferrari 250 GT SWB Berlinetta Competizione Scaglietti en amarillo ofrecido por RM Sotheby’s.
Capaz de haber bajado el mazo en más de 10 millones de euros, ésta unidad fue una de las que estrenó al modelo en competición durante las 12 Horas de Sebring en 1960. Además, su magnifico estado de conservación -así como un historia en carreras donde aparece la escudería N.A.R.T– hacen del mismo una pieza codiciada para las mejores exhibiciones. Dicho esto, seguro que lo veremos dentro de poco en Villa d’Este o algún evento similar.
En contraste a este cavallino debemos reseñar cómo la zona de compra-venta más popular registró un movimiento importante con todo tipo de ventas. Es más, según parece alguna que otra persona salió del Rétromobile con una pieza de colección a restaurar por poco más de 300 euros. Y ésa es una noticia excelente, puesto que en todos los segmentos ha de haber movimiento.
EL CASO DEL SPIAGGINA, LOS FETICHES SIGUEN COTIZANDO AL ALZA
Quién diría que un sencillo Fiat 500 de 1958 podría llegar a bajar el mazo en más de 370.000 euros; pero sí, ha pasado. De todos modos en su descargo hemos de señalar cómo no se trata de una unidad cualquiera. Lejos de ello es una adaptación “costera” -con habitáculo abierto e incluso sus correspondientes asientos de mimbre para los días de playa- realizada en los talleres de Mario Boano.
Como ya hemos visto otras veces, un tipo de vehículo relativamente común en los veraneos de la burguesía italiana. Eso sí, en este caso la unidad subastada por RM Sotheby’s tuvo como primer propietario al mismísimo Gianni Agnelli. Y claro, evidentemente el fetiche de poseer la misma montura donde L’Avvocato posó su bañador empapado de salitre mediterráneo cuesta lo suyo.
En fin, hace tan sólo unos días el Lamborghini de un personaje bastante menos lúcido, elegante y educado ha batido nuevos récords en subasta. Sea como fuera, por lo que parece el fetichismo relativo a los antiguos propietarios sigue siendo un factor determinante a la hora de condicionar la cotización de un vehículo.
GIRARDO & CO, UN MODELO DE EXCELENCIA
Más allá de los espacios desplegados por las casas de subastas o las marcas -donde destacó el de Volkswagen celebrando la historia del Golf-, en Rétromobile 2024 muchas de las miradas se dirigieron hacia empresas como Richard Mille. Ligada al mundo de la relojería, ésta ha decidido invertir con fuerza en el patrocinio de los deportes a motor a fin de potenciar su imagen corporativa.
De hecho, quien siga la actualidad de las 24 Horas de Le Mans seguramente habrá podido ver su referencia rotulada en el Ferrari 499P ganador de la última edición. Es más, en la muestra llevada por Richard Mille se encontraba el mismo, felizmente escoltado por un 312PB de 1971 -ganador en los 1000 Kilómetros de Spa con la dupla Merzario-Redman- y un soberbio 412P de 1967 ex David Piper y, atención, no por ello pintado en su sempiterno color verde.
No obstante, el espacio más fascinante de entre todos los desplegados en París fue el de Girardo & Co. Presidido por un rotundo 250 GTO de 1963 en éste también destacaron un 340 America Barchetta de 1951 con carrocería Touring Supperlegera rematada en un intenso color azul. Una pieza plena de encanto y, como no podría ser de otra manera, en perfecto estado de conservación.
A esto se le deben añadir hasta otros siete Ferrari -Girardo & Co se enfocó sólo en la casa italiana- dando una atención exquisita a los modelos de competición. Asimismo, hemos de recordar cómo la empresa británica custodia un estupendo archivo con materiales de todo tipo, no sólo relativos al historial de sus unidades.
Una labor de investigación, compendio y accesibilidad de la cual ya podrían tomar nota diversos departamentos de históricos en no pocas marcas.
MG, LA MARCA A CELEBRAR
Aunque hoy en día los productos comercializados bajo su nombre no tengan nada que ver con su historia deportiva, lo cierto es que MG es una de las referencias indiscutibles si queremos trazar la evolución del motor británico. Es más, a la luz de sus biplazas ligeros resulta imposible no situarla en influencia y trascendencia junto a Lotus o la propia Jaguar.
Además, durante este 2024 está celebrando su primer centenario; un acontecimiento del cual se hizo eco el Rétromobile desde el diseño mismo de su cartel, en el cual se ilustraba al modelo de velocidad EX 181. Dicho esto, la organización de la feria sumó esfuerzos junto al British Motor Museum de cara a presentar una selección con la cual trazar la trayectoria de MG en todo su esplendor.
Gracias a ello pudimos admirar no pocos de sus roadster, pero sobre todo piezas únicas, significativamente históricas, como el mencionado EX 181. Pensado para batir el récord mundial de velocidad en la clase F, éste cuenta con -a nuestro parecer- una de las mecánicas más interesantes de todos los tiempos.
No en vano, a pesar de su aspecto bajo sus paneles aerodinámicos se encuentra un motor con poco más de 1.1 litros. Eso sí, capaz de rendir hasta 300 CV gracias a una serie de complejos ajustes entre los cuales destacada un potente sistema de sobrealimentación. Con todo ello, en 1957 alcanzó los 395,32 kilómetros por hora -con Stirling Moss- para, tres años más tarde, sobrepasar los 410 con Phil Hill a los mandos. En fin, sin duda algo propio del nivel marcado por Rétromobile 2024.
Por último, no podemos terminar sin mencionar el precioso Nacional Pescara que estaba a la venta. Se trata de una de las dos unidades que se supone que sobreviven de la efímera marca española creada por los hermanos Raúl y Enrique Pateras. El primer cuaderno de la FEVA se dedicó precisamente a glosar la historia de Nacional Pescara.
Imágenes de Unai Ona.