El Museo del Aeropuerto de Málaga es una de esas joyas desconocidas para muchos pero que van cobrando progresivamente el protagonismo que merecen. Este museo, de visita completamente gratuita, logra llevar a los visitantes a un viaje en el tiempo, pues las instalaciones son las de la terminal original, repleta de elementos de otra época, tal y como la conocieron los primeros turistas que venían en avión a la Costa del Sol.
Además de contar con aviones históricos y piezas de colección como uniformes de aerolíneas antiguos, los vehículos clásicos tienen un importante lugar en el museo. Y es que en los aeropuertos había una fauna automovilística distinta a la de cualquier otro lugar, con camiones de bomberos especializados o automóviles que guiaban a las aeronaves por la pista.

¿QUÉ HACE TAN ESPECIAL AL SAAB 900 I DEL MUSEO?
El Saab que hasta ahora estaba escondido del público también es uno de esos coches que solo podía existir en un aeropuerto. La compañía sueca responsable de fabricar estos automóviles inició su andanza industrial con la producción de aviones, un negocio en el que continúan hoy en día.
Con una estrecha relación entre el mundo del automóvil y la aeronáutica Saab fabricaba una versión del moderno 900i que contaba con una quinta rueda. La función detrás de este curioso elemento era medir el agarre de la pista de vuelo a más de 200 kilómetros por hora, para determinar las condiciones del firme en distintas circunstancias.
En su época fue relativamente común verlos en funcionamiento en los distintos aeropuertos del mundo, pero actualmente se cree que el Saab malagueño es el de los pocos supervivientes de su estirpe, sino es tal vez el único. El desembolso por uno de estos coches era superior a 13 millones de pesetas de la época, el equivalente a 80.000 euros actualmente.
El coche se jubiló hace años, y por fortuna su destino final no fue un desguace, ya que el Museo del Aeropuerto de Málaga le reservó un lugar donde guardarlo. Pero los años a la intemperie no le han hecho justicia al Saab, y aunque solo marca 28.000 kilómetros en el odómetro el 900i necesita una amplia restauración.
UNA CONCENTRACIÓN PARA ANUNCIAR EL PROYECTO
Desde el Museo del Aeropuerto de Málaga saben la simpatía que despierta su espacio a los aficionados a los coches clásicos, siendo algunos de sus guías y voluntarios propietarios de vehículos antiguos. Por esta razón para presentar al público el proyecto “Salvemos el Saab 900i” decidieron realizar una concentración de clásicos en sus instalaciones, a la que asistieron decenas de personas y vehículos.
El coche protagonista se ubicó en la plaza central del museo, donde se situó también una hucha en la que los asistentes pueden hacer sus colaboraciones altruistas para este bonito proyecto. Por lo pronto el Saab permanecerá allí durante al menos un mes, por lo que es la ocasión perfecta para contemplarlo antes de que reciba su lavado de cara, y también el momento ideal para participar con una donación en una restauración única para la que un mecánico ya se ha prestado voluntario. Después el 900i ocupará un lugar muy especial, ya a cubierto, dentro de este museo cargado de encanto.
Imágenes: Rafael Sánchez, Antonio Martín (@tonimm91), José Francisco Muñoz Antivon (Historia del Automóvil en Málaga)