Javier Romagosa
Albert Weinzierl es el afortunado poseedor de esta Giulia GT. No sabemos si es una GTAm original o una recreación. El hecho de que la hayan modificado extensamente en vez de preservar su originalidad nos hace pensar que debe de ser lo segundo, aunque nunca se sabe. El caso es que da gusto verla y, sobre todo, oírla.
Su dueño parece estar enamorado de ella, y durante el metraje hace referencia a que tiene alma. Es algo que os sonará a más de un afortunado poseedor o admirador de los autos italianos. Lo define como un coche que conduces desde dentro, llegando a fundirte con él. Es curioso como hace una distinción de su Alfa Romeo con por ejemplo los BMW, con los que considera que siempre hay una separación hombre-máquina. En fin, para gustos los colores.
Volviendo a los hechos, a este coupé de la serie 105 se le ha hecho de todo: aligeramiento extremo hasta los 920 kilos y preparación de chasis y carrocería con componentes de primera calidad. Respecto a la mecánica, se ha llevado la potencia hasta los 220 CV. Algunos considerarán la aplicación de inyección como un sacrilegio, pero antes de hacerlo hay que ver cómo anda.
Sin ánimo de extendernos, os dejamos con este pequeño bólido. Aquellos lectores que deseen ver el vídeo entero que recuerden que tienen a su disposición los subtítulos con traducción automática en castellano: si no se habla inglés, son realmente útiles. ¡Gas!
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