¿Dónde están hoy todos los clásicos de carreras pata negra? En la mayor parte de los casos, guardaditos en su garaje. Valen demasiado dinero par sacarlos a pasear, y sus dueños suelen tener réplicas que son aceptadas como originales en las competiciones.
Antes de que un Aston Martin DB4GT Zagato -uno de los grandes rivales del Ferrari 250 GTO- costase más de diez millones de euros, el coche se podía usar como veis en el vídeo de debajo. Sobre todo, si era la última evolución aligerada -más todavía- del modelo, prototipo del subsiguiente DP214. Se hicieron tres ejemplares de este unicornio.
El Aston-Martin DB4GT Zagato matrícula 2 VEV es posiblemente el más conocido de ellos, ya que fue conducido por Jim Clark en Goodwood y Montlhery. 3,7 litros, 320 CV, 1.250 kg; carrocería Zagato para una de las grandes berlinettas de la Historia del Automovilismo. Espero que disfrutéis del vídeo, subid el volumen.
Foto de Bonhams.