Miguel Sánchez
Diseñado para ser un “paraguas con 4 ruedas”, el Citroën 2CV es uno de los clásicos más populares y queridos por la afición al motor. En los veranos del pueblo… Porque lo tenía aquel vecino… Cuando lo compró tu primo… quien más quien menos ha conocido o montado en uno, experimentando los bamboleos de su suspensión y lo espartano de su interior. Pensado para aguantar un uso diario todoterreno, y con más de cinco millones de unidades vendidas desde 1948 hasta 1990, el Citroën 2CV forma parte de los recuerdos de muchos de nosotros.
También de los de Luis Miguel Rodríguez, un joven malagueño -en el vídeo se puede apreciar su aún necesaria “L”- que en este vídeo nos narra cómo en su familia la pasión por el motor clásico ha pasado de generación en generación. “La gente me mira, me sonríe, me lo intenta comprar…” Así describe Luis Miguel lo especial de ir en un 2CV restaurado. Un 2CV que recupera el recuerdo de aquel que antes tuviera su abuelo: mecánico de profesión que supo pasar el oficio al hijo y la pasión al nieto.
FILMANDO UN 2 CABALLOS AL GALOPE
Cuando salió al mercado a finales de los años 40, el 2CV montaba un motor de 375 cc con 9CV de potencia. Sin embargo, a lo largo de su extensa vida las motorizaciones evolucionaron hasta los 602 cc y los casi 40CV que rinde la versión v6, lanzada a comienzos de los ’70 y recogida en este vídeo. Acostumbrados a leer sobre motores Ferrari, Porsche o Mercedes… no es una cifra que resulte impresionante. Pero si tenemos en cuenta la relación peso/potencia estamos ante un ejemplar más encabritado de lo que pudiera parecer en un principio.
Ese “carácter encabritado” queda perfectamente reflejado en el vídeo de Luis Miguel Rodríguez, donde vemos las respuestas del 2CV serpenteando las curvas de los Montes de Málaga. Una sensación más “radical” de lo que se pudiera esperar de un coche como éste. Tanto en el sonido -pura chapa de acero por todos lados- como en las curvas -gracias a su suspensión de brazos longitudinales- el 2CV es un coche con una personalidad tan única como divertida.
Como muestra, en una escena podemos observar la famosa “escora” en curva del 2CV. El cual, gracias a este particular sistema de amortiguación, se inclina mucho más de lo normal. Aquella suspensión diseñada así de blanda para poder “transportar huevos” con seguridad, ofrece emociones fuertes con sus amplios balanceos. Hazte una idea viendo el vídeo:
EL PRIMERO DE LOS QUE VENDRÁN
Para los que nos gustan los clásicos, éstos no son simplemente máquinas. Nos cuentan historias, transmiten emociones y nos llevan a investigar cómo surgieron y evolucionaron ciertos modelos. Un clásico no es simplemente un coche, es también todo aquello que lo rodea: su historia. Por eso, no podemos sentirnos más identificados cuando Luis Miguel declara que ‘con el tiempo descubrí que lo que de verdad me gusta son las historias que hay detrás’.
Y para ello, para contarnos esas historias que hay detrás de cada coche, acaba de crear el canal De Asfalto. Su primer vídeo es esta historia que, aún siendo suya, nos balancea a muchos los recuerdos como si aún fuéramos unos críos en el asiento trasero de aquel 2CV, dando botes rumbo al rio.
