Iván Vicario Martín
El pasado domingo 10 de noviembre, tuvieron logar las XIII Jornadas de Restauración de Vehículos Históricos Ciudad de Huesca, un evento ya tradicional en el calendario de clásicos de la comunidad aragonesa. Se trata de una actividad que busca concienciar a la administración, la población en general y a los aficionados al vehículo de colección de la importancia de conservar este patrimonio cultural e histórico reconocido por la Unesco.
Además, siempre son proyectos de restauración totales, durante estos 13 años han sido motivo de las jornadas tanto automóviles como motocicletas. La idea es poner en valor el trabajo del restaurador, sobre todo los trabajos que no se ven, la recuperación de mecánicas, sistemas hidráulicos, sistema eléctricos, chapa… en definitiva, esos trabajos ocultos que suponen un 80 % de las horas invertidas en la restauración. Hablamos de procesos desconocidos e infravalorados que, en muchas ocasiones, son los que nos darán la seguridad y fiabilidad, pues no nos podemos quedar simplemente en la estética, en lo que vemos.
Hacemos hincapié e invitamos a todas las escuelas de formación profesional grado automoción de la provincia para conseguir atraer a jóvenes mecánicos y puedan ver que se trata una posibilidad de trabajo real. Y es que se estima que hay más de 40.000 vehículos históricos que a lo largo de su vida necesitan ser mantenidos. Hablamos de reparaciones más o menos complejas y algunos restauraciones de distinto nivel con el nuevo Reglamento de Vehículos Históricos este número se multiplicara sin duda.
Por las Jornadas han pasado tanto Restauradores profesionales como aficionados con importantes conocimientos en mecánica y buenísimas manos.
PROTAGONISTA: MORGAN SUPER SPORT
En estas XIII Jornadas de Restauración de Vehículos Históricos Ciudad de Huesca el proyecto ha sido es un Morgan Super Sport MX4 de 1934, restaurado totalmente por Sergio Romagosa y Carlos Puentes. Sin duda, fue proyecto complejo, pues al tratarse de un automóvil de 1934, hubo que restaurar todo, partiendo de una unidad en aparente buen estado.
Como suele ocurrir, las sorpresas fueron saliendo conforme avanzaba el proceso de desmontar. Se pudieron superar gracias una extensa información bibliográfica y fotográfica de otras unidades antes de comenzar esta aventura. Las buenas manos y oficio de los restauradores fueron librando obstáculos mes a mes: fabricación de troqueles para confeccionar piezas imposibles de localizar, fundición partiendo de moldes confeccionados como pruebas en madera, intercambio y localización de otras en Gran Bretaña, restauración del armazón de madera de fresno y, cómo no, chapa, motor, sistema eléctrico, mecánica , etcétera.
En definitiva, toda una lección magistral de restauración de alto nivel. Los más de 100 asistentes disfrutaron y preguntaron dudas después de la charla, muchos aficionados siguieron la charla por el canal YouTube del club que lo retransmitió en directo, disponible en este medio para el que lo quiera consultar.
